ACZINO EN 2016: CAERSE PARA LEVANTARSE

Antes de coronarse en su país en 2017, Aczino afrontó una temporada aciaga, en la que sobrevivió a un público adverso y a una derrota generacional histórica. El camino del mejor freestylero que se ha parido se vio marcado por sus momentos más oscuros.

Por: Álvaro Moreno – @alvaromorenomad

Como en muchos otros casos en el freestyle, la carrera de Aczino en la disciplina es digna de película. Con unos inicios duros, teniendo incluso que ir a probar suerte a Colombia para dar el salto definitivo a los escenarios, el 2016 fue el año más difícil para el mexicano después de haberse hecho un hueco en la élite. Sin embargo, quizás fue necesario para conseguir todo lo que vendría en el siguiente curso. Este período fue el Sugar Ray Leonard de Roberto Durán en la vida de Aczino, una derrota para volver a retomar el camino.

Tras un 2015 ciertamente exitoso (campeonatos internacionales como BDM o God Level Fest y nacionales como la Red Bull), parecía que Aczino no quería competir por todo como otros años. Con muchos de los puestos internacionales asegurados por el rendimiento dado en el curso anterior, su 2016 parecía que iba a estar dominado por unas exhibiciones que cada vez eran más normales y que tenían como uno de los protagonistas al mexicano. Con Chuty en Beatground o con Skone en BDM Pandillas serán las más recordadas por el público ese año. Poco rodaje competitivo.

De esta forma, ni por el recorrido nacional de Red Bull pasaría. Como se ha dicho, no era el año competitivo de Aczino. El mexicano sorprendió a todos cuando dijo “no” a la competición de su vida (la cual ya había conquistado tres veces en ese momento) sin presumiblemente saber que luego estaría en la fase internacional (la de Perú fue la primera edición internacional de Red Bull que aplicaba el formato de la repesca del podio anterior). Parecía que se quería tomar un descanso de la presión de ganar todo lo que se te pone por delante.

El primer golpe fue el de la Red Bull. Lima estaba emocionado de recibir un evento internacional de la competición por primera vez en el país y por primera vez con 16 participantes en una terna que brillaba por los nombres que figuraban en ella, sobre todos los de Chuty y Aczino, que todos veían en la final. No fue el caso.

Los dos perdieron en los octavos de final, aunque el español de mejor forma que el mexicano. Mau se cruzaba con el local (Jota) y con todo el estadio en su contra, no pudo con la presión. Su nivel no fue el mejor y al que tiene acostumbrado al público, y éste no ayudó a que se volviera a coger el hilo argumental de la batalla. El aviento de la botella ya es un hecho histórico inolvidable de las batallas, la cabeza de cerdo del Camp Nou en el freestyle.

En la BDM cambiaron las cosas, pero tampoco fue su cita de ensueño. El nivel volvió a ser el de siempre y gracias a eso volvía a la final de la Deluxe. Como en el año anterior, Teorema (más joven, prometedor e inocente) era el rival. En una batalla llena de referencias, esta vez el chileno consiguió su revancha. Cierto es que la calidad de esta batalla no es comparable a la Perú, ya que ambos rozaron la perfección en esta ocasión, pero otra vez se le escapaba de las manos. Con esto, acababa un 2016 en el que Mau no consiguió ningún título, aunque suene raro.

Sin embargo, en el 2017 otro gallo cantaría. Nadie sabe por lo que pasó el gallo en ese viaje transicional de temporada a temporada, pero lo que está claro es que le sirvió. Aczino volvió con hambre, y como ejemplo más representativo, Red Bull. Volvió a las regionales y nacional sin vergüenza por rodearse entre mortales y campeonó para hacerse con el cinturón internacional en casa. Y no contento con eso, consiguió ser el número uno en todos los eventos del circuito competitivo en el que se presentó.

Supongo que ese momento de su vida se llamó felicidad. Con un guión perfecto de subidas y bajadas, con un final perfecto, el periplo de Aczino durante los años 2016 y 2017 son dignos de biopic estadounidense. Interpretándose así mismo, el mexicano ha sido, es y será ejemplo e influencia de todos sus contemporáneos y futuros.  

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