CHUTY, BNET, ACZINO Y WOS: LOS PRIMEROS ACERCAMIENTOS AL RAP EN SU VIDA

Un repaso sobre cómo fueron las primeras aproximaciones y referencias de los actuales gallos de élite al freestyle y al rap.

Por: Aldo Cadillo

A finales del 2011, la revista estadounidense GQ se planteó esta pregunta: “¿Quiénes son las leyendas vivas de la música que han sobrevivido contra toda adversidad?”. Y la primera interrogante después de la duda fue: “qué es adversidad y cómo se definen a las leyendas”. Ante esto, GQ resolvió la incógnita definiéndolos como “gente increíblemente influyente” y que además “hayan pasado por el infierno” pero que tengan vigencia y, sobre todo, que sigan haciendo música.

Eminem calzaba con la descripción. El rapero de Detroit antes del 2011 ya había lanzado sus exitosos álbumes The Slim Shady LP (1999), ganador del Grammy, y The Marshall Mathers LP (2000), el álbum de hip hop más vendido de la historia. Además de ganar el Oscar a la mejor canción original por su tema Lose Yourself (2003), como parte de la banda sonora de la película 8 Mile. Viviendo entre la luz del éxito y la sombra de las adicciones, Eminem es una figura llena de contrastes que es admirada por casi todos los amantes del rap; pero, a su vez, odiada por unos cuantos.

La calle de las ilusiones

“Marcó bastante la película”, comenta Chuty en una terraza de Madrid a finales del 2019. Está atardeciendo en la capital española y el tricampeón de FMS habla con Skone sobre sus referentes en el freestyle. “La primera batalla que vi fue la final del 2006 entre Rayden vs. Joarnarman”, menciona. Luego toma un sorbo grande de una bebida energética y continúa. “Tenía entre trece y catorce”, relata dejando en claro que Eminem, y el film, lo marcaron.

“No sabía que había una versión en español de lo que hacían en 8 Mile; pero, mi ingreso al freestyle fue más posterior a la película”, comenta Bnet en la misma terraza junto a Chuty y Skone. Aún sin saber que se convertirá en campeón mundial internacional de la Red Bull Batalla de los Gallos Madrid 2019, el improvisador habla de sus referentes en la movida y recuerda los acontecimientos que marcaron sus primeros pasos en el arte de rimar.

“A eso de los 10 años empecé a escuchar rap”, recuerda inexpresivo. El madrileño relata sin rimar que en su comunión le regalaron un mp4 y ahí dejó de escuchar la radio, donde oía lo que a otros les gustaba pero que no era necesariamente lo que él quería, y fue a Ares, un programa de internet pionero en la descarga de música, para bajar los temas que de verdad le encantaban. Esto lo cambió todo.

Bnet vio su primera batalla a los doce. El freestyler aún guarda en la memoria los nombres de los improvisadores, en dónde fue y el año en que sucedió. “Recuerdo que fue una batalla de calle entre Arkano y Turi contra Mr. Ego y Waor”, dice. El material de ese video aún se encuentra en YouTube.

Al otro lado del charco

Para Wos, más músico que freestyler ahora, la película de 8 Mile también lo marcó. Recién convertido en campeón nacional de Argentina en 2017, habló de sus inicios para la web de Rolling Stones. En una conversación de cafetería, comentó que descubrió la improvisación luego de ver a unos “pibes” haciéndolo en vivo.

“Empecé grafiteando en el barrio y ahí vi pibes que rimaban. Lo poco que conocí de rap era Eminem y nada más. Y en seguida nos mandamos. Luego de un día empezamos, no salía nada. Era una cosa muy graciosa. Tenía catorce años”, comenta el también actor.

De ahí en más siguió practicando hasta que fue un domingo al Parque Rivadavia. Se metió en las competencias de El Quinto Escalón hasta que llegó a coronarse campeón nacional e internacional de Batalla de los Gallos. Claro, acá se cuenta en 36 palabras; pero, fue un camino de varios años. De idas y regresos. Todavía con la estela de su legado, ganó la nacional de su país en su primera participación, quedó subcampeón en la Internacional coronándose posteriormente campeón mundial al siguiente año. Wos ahora está más enfocado en su música; pero, con la petición diaria de sus fans que le exigen que regrese al arte de las rimas.

Rap mixto

“Este momento es más que un sueño. Actualmente sigue siendo raro despertarme y ver toda la repercusión que tiene lo que hemos hecho todos estos años”, menciona Aczino mientras va de copiloto de Mowlihawk. Es mayo del 2018 y el rapero cuenta detalles poco conocidos de su vida. “Me detectaron apendicitis y se me complicó bastante”, relata para graficar el crítico estado en el que estaba. “Durante dos semanas, después de la operación, estuve internado y me alimentaban por suero. Fue en el 2013. Estuve durante un mes muy mal”, explica mientras se acomoda la gorra.

Quizás el Aczino actual no se hubiera formado si nunca hubiera ido a la casa de discos que tenía un amigo en su barrio. Ahí fue que Mauricio conoció el rap, el freestyle, el skate, los grafitis y toda la cultura del hip-hop. 

“Mi primer acercamiento al rap fue mixto. Primero oía a alguien de mi barrio, El Nopalez, y a otro par de amigos que tienen una tienda. Y por personas que iban a la tienda a improvisar y a grafitear es que conocí el freestyle y el rap”, relata. “Conocí el disco de Nas, God’s Son del 2002. Es mi disco favorito pues con ese disco me enamoré del rap. También oía a los españoles: Toteking, Nach, Violadores del Verso, SFDK. Ahí fue cuando realmente me interesé en el rap. 2004 y 2005. Fue increíble encontrar ese nivel de lírica”.

Si bien 8 Mile no le había llamado la atención, fue al escuchar a Zatu batallar en la final Internacional del 2005 cuando realmente Aczino se interesó por el freestyle de alta competencia. Es ahí que empezó a improvisar. Tenía 14 años.

“Quiero que, en 50 años, cuando las batallas sean el deporte mejor pagado en Latinoamérica, la gente me recuerde por haber marcado algo en esto”, comenta Aczino. El mismo anhelo precursor de otros emblemas del freestyle como Chuty, Wos y Bnet. Una generación que ha marcado al mundo de la improvisación por sus logros obtenidos, torneos ganados e impacto en los amantes de la rima.

En el número de noviembre del 2011 de la revista estadounidense GQ, aparecieron en la portada el legendario guitarrista de los Rolling Stones Keith Richards y las leyendas del rap Eminem y Lil Wayne. Quizá, en algunos años, sean los rostros de Aczino, Chuty, Wos o Bnet los que estén en primera plana. Recordando sus inicios, caídas, ascensos y logros. Inspirando a nuevas generaciones como referentes máximos del freestyle.