#8M: ECOS DE UN BANZAI ETERNO, EL MANIFIESTO DE LA GATA

Por: Julieta Agostina (@julietagostina___)

Un play puede cambiarte la vida para siempre. Yo atesoro este play en particular. Hace poco fue 2 de marzo y te fuiste. De manera anual vuelvo a ese disco y a ese momento suspendido en el aire. 7 años pasaron y 7 veces volví para recordarme que hay cosas de las que no tenemos que olvidarnos nunca.

 

Gata Cattana es una resonancia que llega de lo más profundo del hip hop español. Una ola roja y filosa que se extiende a lo largo del continente de habla hispana, marca indeleble para quienes encontramos en ella un refugio ante tanta nada y tanta injusticia. Oriunda de Córdoba, España, Ana García Llorente se posicionó a lo largo de los años como una de las voces del rap hispano más potentes e imponentes no solo por su habilidad a la hora de tomar un micrófono en el mundo musical o poético sino por su fuerte impronta de lucha y capacidad para hacer nacer de sí aquello que gustaba decir.  La génesis de su combate simbólico la conforma inmersa en el mundo colectivo, un mundo que abraza causas y amplifica el poder de las voces que en ella se desarrollan.

Escuchar a Gata Cattana sin notar a simple vista el carácter contestatario de su semiótica artística, es no prestar atención a la agudeza que presentan las referencias en cada una de sus barras y versos. Muchos de ellos, nos derivan a otros materiales fundamentales que son esenciales en algunas arenas de combate social como el feminismo, movimiento que hoy nos encuentra nuevamente en el recordatorio permanente de que nuestros derechos nos pertenecen y que las violencias sociales a las cuáles somos sistemáticamente expuestas debieran terminar de una vez y por todas.

El universo que generó la artista a lo largo del tiempo, es un espacio en donde la injusticia y la violencia no quedan impunes. Si algo caracterizó a la Gata fue la capacidad de no sentirse ajena al dolor del otro, de enfocarse en lo que incomoda, lo que divide. De apretar la herida o cortarla con su katana y dejar que brote la palabra. Mitología griega, política internacional, filosofía, breaking, podemos encontrar un poco de cada mundo en las letras que nos regaló para hacernos comprender la importancia de la alteridad social y de cómo ,desde estos espacios, podemos construir puentes para ejercer resistencia ante ese cúmulo injusto que sus ojos de punto rojo detectaron tan claramente.

Por poner un ejemplo de las capas de contenido a las que nos expone una exploración de sus escritos , sean letras de rap o poemas, y teniendo en cuenta la fecha que corre, “Lisístrata” es la muestra perfecta para la ocasión. Podemos evidenciar como todos los paralelismos conceptuales que le atravesaban se unen de manera transversal en cada una de sus creaciones. Este breve análisis nace como aporte a esta lucha permanente y como abrazo a una de las mujeres que más me marcó en ese sentido. Gracias Gata por todo siempre.

“Lisístrata”, el manifiesto que la Gata nos dejó:

Empecemos por los significados alrededor del título de la canción. Lisístrata es dentro de la obra de Aristófanes, un hito de la historia del teatro griega ya que representa una huelga de mujeres en la antigua Grecia frente a la desigualdad a la que ya desde aquellos tiempos fuimos sometidas. Estrenada en el año 411 a.C fue desde sus inicios una obra que propone una revisión respecto a la situación de las mujeres griegas de antaño.

Lisístrata, la que disuelve ejércitos, es la protagonista del relato, quien en conjunto con otra serie de personajes, también mujeres, toman la Acrópolis y deciden unir esfuerzos para terminar con el conflictos de las ciudades estado, que era lo que generaba gran parte de su malestar social. 2.429 años han pasado desde la publicación del material y aún hoy es retomada por ser una de las presentaciones teatrales de las sociedades antiguas que aborda la temática de la desigualdad social entre hombres y mujeres dejando más que claro que este conflicto  no es nuevo, por el contrario, es tan antiguo como la conformación social en sí misma. “Y ando cayendo ya,encallándome en mi propia guerra civil como Lisístrata,sin más que decir, que aportar a la causa un tributo a mis musas que luchan”

No es casual que en la obra de la Gata esta canción, esta letra en particular, despierte una sensibilidad específica cuando se trata de la lucha por nuestros derechos. Las referencias que podemos encontrar dentro de la canción son material de peso dentro del feminismo contemporáneo y la historia de lucha de las mujeres  y por ello, creo que vale la pena desandar algunas de ellas en pos de revalorizar la construcción conceptual que Ana nos dejó a manera de manifiesto en algunas de sus barras más concentradas y abrasivas.

Vamos con la primera: “Yo no camelo perfumes de Nina Ricci, soy más de libros de la Silvia Federicci” ni bien comienza el verso ya nos encontramos con una figura de amplia potencia dentro del feminismo como lo es Silvia Federicci. Filósofa, activista, escritora, es sin dudas una de las voces italianas más potentes del feminismo anticapitalista. Destaco lo de anticapitalista porque si algo no dejó pasar la Gata, fue dentro de la lucha feminista, la desigualdad de clases existente que empeora aún más las condiciones de opresion de miles de mujeres del mundo.

En muchos de sus poemas la subsistencia y la pobreza son un tópico desarrollado siendo “ Con las manos” una de las mejores expresiones de esta concepción ideológica en donde el feminismo y la cuestión de clase no se encuentran desconectadas sino todo lo contrario. La opresión económica, la desigualdad en esta materia, es una de las variables de vulneración más silenciosas y sutiles dentro del gran abanico de problemas que nos encuentran a nivel social.

Un poco más adelante, la letra reza “Os lo tengo dicho, os lo dejo hecho,al punto, la teoría King Kong no apunta”. La teoría King Kong es una de las literaturas obligadas a la hora de hablar de feminismo. La autora francesa, novelista y cineasta Virgine Despentes deja en esta obra una potente incisión sobre la realidad social contando de forma autorreferencial algunas crudas experiencias y apuntando a temáticas problemáticas dentro del universo social de las mujeres, como la maternidad o la represión del deseo frente a las violencias cotidianas. La autora habla de su producción como nacida desde la fealdad, porque “El ideal de la mujer blanca, seductora, que nos ponen delante de los ojos es posible incluso que no exista”. No es tarea de esta nota desarrollar a fondo el contenido de las referencias pero sí presentarlas o acercarlas, traerlas a la superficie en caso de que puedan serle de utilidad a quienes la lean y sientan curiosidad por investigar en ellas. Son herramientas poderosas.

 

 

Continuamos: “Odio en la hoguera con tres brujas durante la inquisición”. Esta frase nos retrotrae a la modernidad temprana. Por el contrario a lo que se cree, la caza de brujas o la quema de las brujas y personas condenadas por “herejía” no responde a un período de la alta edad media sino que es bastante más cercana de lo que pensamos. Hablamos de los siglos XVI y XVII en la región central de Europa, más específicamente en los países como España, Austria, Italia y Portugal. Este momento terrible tiene su correlato en la región latinoamericana siendo Perú uno de los países más afectados. Por supuesto, de entre los miles de asesinatos cometidos,  la gran mayoría de ellos fueron perpetrados contra mujeres que bajo falsa acusación no podían demostrar su “humanidad” y perecieron bajo violentos métodos de tortura. Malleus Malleficarum fue el nombre de la publicación más conocida como Martillo de las Brujas, una suerte de guía sobre cómo cazar mujeres acusadas de poderes sobrenaturales.

En el caso específicamente español, la inquisición española comienza a desarrollarse a partir del año 1480 cuando los reyes españoles aprueban la llegada del tribunal de juicio que conforma esta oscura etapa de la historia del país hispano. Auto de fe fue la denominación que tomaron estos actos públicos en donde la inquisición quemó en vida a miles de personas. Una vez más queda demostrado no solo el profundo conocimiento que Gata poseía de la historia de su país sino también de la amplitud de sus investigaciones a la hora de hablar de feminismo y la longevidad de esta violenta historia de injusticias que es uno de los principales ejes temáticos de toda su obra. 

“Rosa Luxemburgo, Campoamor, griega, amazonas, Vestal romana, sendero impío hacia la vida humana, Keny Arkana, Safo, Hipatia, Parks y Hatshepsut,Yo os invoco hijas de Eva buscando una luz”.

De acá solo voy a tomar 3 nombres de la línea histórica que Gata rescata en el encriptado propuesto. Rosa Luxemburgo, Keny Arkana y Safo. 

Rosa Luxemburgo fue conocida como el águila de la revolución soviética, es dentro de la historia política de Rusia uno de los primeros femicidios políticos de la época ya que fue asesinada en el año 1919. Fue también una de las mujeres pioneras en la vida universitaria, espacio académico reservado estrictamente a los hombres. Creadora del períodico La Bandera Roja, es considerada una de las más grandes revolucionarias del silo XX y una figura fundamental en la lucha feminista.

Con Gata comparte la visión que se repite en su entramado. La clase social si importa y la igualdad debe darse en planos simultáneos siendo una de sus frases más conocidas la que expresa que debemos luchar “Por un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres”. En el plano artístico las cartas escritas por Rosa Luxemburgo a sus compañeras son consideradas poemas en la historia política rusa que involucró a miles de mujeres en su transcurso. “Estas pequeñas estampillas de la vida las guardo con color, olor y sonido de por vida en la memoria y me siguen alegrando” escribía mientras desarrollaba su activismo político en los años subsiguientes al 8 de marzo de 1917, año donde comienza el proceso revolucionario contra el régimen zarista.

Safo por su parte, proviene de uno de los mundos más amados por Ana, el que se refiere a Grecia y su historia. Este personaje es uno de los pocos que trascendió la antigüedad a manera artística por ser una poeta que en su época dejó marca por la agudeza de sus temáticas referentes al mundo de las mujeres, temáticas que al día de hoy continúan en discusión. Conocida en el mundo antiguo como “ La Poeta” o según Platón, “ La Décima Musa” , toda una corriente dentro del mundo de la prosa poética lleva su marca. Cuando hablamos de la estrofa sáfica hablamos de la forma estilística proveniente de la pluma de Safo para retratar la naturaleza amarga del amor, quitando peso al romanticismo hace más de 3000 años. “Pero a todo hay que atreverse cuando nada se tiene.” son algunas de las palabras que podemos encontrar entre los pocos poemas que sobrevivieron al paso del tiempo. El amor en la obra de Gata Cattana encuentra un anclaje a la estrofa sáfica y no es casual que decida retomarla en este hilo de nombres que poseen una encriptada pero intrínseca relación.

Por último, Keny Arkana, una poetisa con mayúsculas de origen argentino. Desde el seno del propio rap como disciplina, de sus manos y voz podemos obtener también una impronta personalísima a la hora de tomar la palabra y ponerla en acción desde el arte.  “La rabia de ver a este mundo sangriento destruirse a sí mismo, y que siempre sean inocentes en el centro del tiroteo, rabia porque es el hombre que creó cada muro, ¿Se barricaría con hormigón, le temería a la naturaleza?, la rabia porque olvidó que era parte de ella”. Este fragmento es parte de la letra La Rage, uno sus himnos en donde se puede evidenciar un hilo conductor similar en cuanto a la composición conceptual a la hora de plasmar desde el rap una visión del mundo cargada de poesía y combate social, cultural y político. Las musas de Gata no hacen caso omiso al contexto que les rodea y en el cual se desarrollan.

¿Qué es lo transversal en este conjunto que menciona la Gata? La capacidad de valerse del arte y el discurso para presentar ante el mundo una crítica social profunda cargada de significaciones y visiones personales que combaten un orden social establecido, injusto y cargado de problemáticas. Discurso accionado  desde las voces de uno de los sectores más vulnerados históricamente en la composición social antigua y contemporánea.Las mujeres. “La poesía es un arma de doble filo”, nos decía Ana y siempre tuvo razón.

Podríamos pasar horas deshilando las tramas y entretejidos que manifestó en sus palabras. Es una actividad que recomiendo. Para concluir tomé este extracto de la canción que me parece una suerte de condensación y síntesis admirable. El andamiaje conceptual de las líneas se sostiene en base a referencias que sólo pueden comprenderse si se indaga o se conoce el peso de la historia de las mujeres en cada una de estas menciones que realiza. La reina de los mensajes encriptados, defensora para siempre de la premisa del conocer profundo como verbo/acción.  Habitar y hablar de las cosas es un estado del arte cuando se trata del mundo del discurso, en este caso con un devenir  poético.

Lisístrata hace una analogía/ metáfora del ejército de mujeres que en la historia del mundo real, por fuera de las ficciones antiguas lucha por conquistar ese poder, no solo el poder político aislado sino también el poder simbólico, el de poder transitar el mundo de una manera no violenta,en donde ser cada una de nosotras desde nuestra experiencia en la realidad cotidiana no sea una tensión permanente ni un transitar violento. Lo es y por ello, cada día como hoy nos reencontramos nuevamente de manera colectiva en un banzai que hace ecos a nivel internacional. 

Hablo de Lisístrata como parte  del tesoro que la Gata nos dejó porque sé que para muchas, sus letras son un manifiesto grabado en lo más profundo de sus corazones. A mí en cierto sentido la Gata me anima  a expresar lo que pienso, de manera simple, genuina, cruda, aunque los costos sean enormes en muchos casos. Ser, hacer y ver como una quiere es una tarea difícil en un espacio tan cargado de violencia. Agradezco siempre haberme cruzado con ella, es una demostración fáctica de que el rap puede cambiar el estado de las cosas para siempre y una palabra, una canción o un poema pueden sanar un poco el mundo.

Una pequeña Lisístrata consolidó esta nota y me acercó lo que Gata significa en sus vidas:

Florencia Muriel, escritora y poeta mendocina editó el texto y para ella: “ La Gata es legado, paloma blanca y fusil. Es la musa de un ejército que invoca a las hijas de Eva buscando una luz y la vamos a encontrar.”

Castero, ilustradora española que me permitió utilizar la imagen que viste esta nota me comentó acerca de su vínculo con Gata que: “ Yo la conocí primero como poetisa antes que como música, y básicamente fui a una librería , siempre me ha gustado leer poemas y poemas y no la conocía de nada, abrí su libro, leí el primer poema y me lo compre porque dije-Joder, que bien escribe y que reivindicativa es– Me encanta su poema con las manos, es mi poema favorito. Luego conocí que hacía música, siempre la ponía mientras dibujaba y cuando vi la portada de su canción Banzai me inspiró mucho y me molo mucho sus ojos, la colorimetría de la portada y de ahí surgió la idea de dibujarla. Su música me inspira a dibujar.”

Lo publica el Estilo Libre y su conjunto de mujeres que luchan.

“  Y a la depresión garras

   A la ansiedad  garras

   Al miedo  garras.

   Al patriarcado garras.

   A este sistema: Gata.

  A los cañones que nos bombardean de una belleza irreal hasta matarnos: Cattana.

  Y hasta el final, Ana.

  Nunca me sentí sola porque estábamos juntas”