YO DIGO: ¿CÓMO ES CUBRIR UNA RED BULL BATALLA DE LOS GALLOS? I Día 1
Fui uno de los corresponsales de las regionales de Buenos Aires. La capital de la renovación argentina de Red Bull. El epicentro del nuevo rumbo de la gallera en el país tiene artífices, protagonistas, secundarios y matices nuevos, que se suman a los de antaño, que pintan de diez. El primer día, con Papo campeón y Cacha de comentarista, nos dejó una cobertura intensa.
Por: Juan Martínez
Difícil. Agotador. Tenso, también. Pero una experiencia excelente. Red Bull tiene esta mística, esa magia que la hace distinta a todo. Vas ahí sabiendo que, si estás de suerte, podes ver el inicio de una leyenda o la batalla más polémica de la historia. Empezas el día, en este caso 14 de Abril, seguro de que no va a ser un día más en la oficina. Y no lo fue.
Nuestro viaje inicia en La Plata. Nadie dijo que cubrir una Batalla de los Gallos en un medio emergente es sencillo. Una vez en Constitución (Buenos Aires) ubicamos el alojamiento alquilado, almorzamos y nos preparamos para ir a Niceto.
Me vestí un poco más formal de lo que suelo hacer. La situación lo ameritaba: El Estilo Libre volvía a Batalla de los Gallos, después de aquella excelente cobertura en el Luna Park, con Blon como comentarista. Era imposible preveer que iba a terminar revoleando el sobretodo contra el suelo del VIP mientras Cacha y Dam se agarraban la cabeza y saltaban por la barra. Había expectativas, claro, pero las noches de Red Bull son las noches de Red Bull, y toda normalidad se puede desmoronar en un segundo.
Red Bull tiene esta mísitica, esta magia distinta a todo
Retomando: llegamos a Niceto Club, en el barrio de Palermo. Ya eran las 17:00, hora pautada con Daniela, la responsable de que, entre otras cosas, nuestras preguntas a Wos lleguen a México. Pasamos junto a personalidades como Juan Medina o Dani y nos encontramos con el único inconveniente de la jornada: no teníamos acceso a backstage. Así nos lo confirmó Federico Stuart, que se tomó el tiempo necesario en medio de la vorágine para explicarnos los motivos, los cuales eran lógicos. Nos resolvió las dudas con la misma cercanía que lo hace con cada fan en las redes sociales y, encima, nos ofreció la posibilidad de entrevistar a algún gallo al final del evento. Completísimo.
Federico Stuart, culture manager de Red Bull Argentina
No había problema. La posibilidad de no ingresar estaba barajada y ya teníamos cosas preparadas. Nos encontramos con Cacha, quien ya estaba preparado para ser comentarista en vivo de la regional, y subimos al VIP. Con la gente dentro y la cuenta regresiva finalizando con puntualidad, apareció Misionero.
Que increíble, ¿no? Un solo tipo. Un solo hombre que, sin otra cosa que su oratoria y lenguaje corporal, encendió la chispa en el muy inflamable público argentino. Enseguida entendí parte del fenómeno: ese público es tan característico porque se alimenta de un host característico. Y viceversa. El Misionero, Darío Silva para los que conocen su versión más mundana, refleja y se ve reflejado en el pogo descontrolado de cada Red Bull Batalla de los Gallos. Y es que no es solo por costumbre: el tipo va y enamora al neófito, y vuelve a sorprender al experimentado.
Iniciaron las batallas y Cacha, ya a mi lado como comentarista, me dijo: “Para mi esta es de Papo”. Yo contesté que “ojo con Bunny”. No me equivoqué: la batalla fue más pareja de lo esperado y el marplatense pasó. Lo interesante fue que la bestia del hardcore disfrutaba como nunca arriba de la tarima.
Papo ante Bunny, en la primera ronda
La expectativa de esa primera ronda también estaba puesta en Frescolate. El campeón internacional de 2005 volvía a Red Bull, rodeado de una nueva generación de freestylers. Se enfrentó con Lujo y perdió, pero se fue aplaudido por Niceto en reconocimiento a la trayectoria y, sobre todo, al reaparecer luego de tantos años en un movimiento que se revoluciona cada prácticamente 365 días.
En cuartos lo más destacado fue el Nasser vs Danyelus. “Tiene ganas de volver” repetía Cacha constantemente. La batalla lo ameritaba: Nasser es un perro viejo de las competencias de La Plata, un freestyler sólido a tener en cuenta. “Tiene ganas de volver, que grande el Danye”. Y Danye volvió, tras desatarse en el enfrentamiento contra el dignísimo platense.
Los campeones nacionales se hallaron detrás de las decisiones de ambas fechas
Claro, Danyelus sí se había ido durante un tiempo. No físicamente: estuvo en eventos, se subió a escenarios y batalló. Pero Federico, el hombre atrás del AKA, estaba en otro lado. Golpes de la vida, de esos que no todos superan, de esos de los que no todos vuelven, lo desdibujaron e incomodaron cuando tenía que dar un espectáculo. En la entrevista que le haría después, al finalizar el evento, me encontraría a alguien que está en proceso de recuperar la vitalidad: “Te digo la verdad, no me imaginaba la respuesta de la gente como se dio. Tuve momentos que en mi vida personal no estaban las cosas alineadas, ahora se encamina todo de otra manera y se trasmite en el escenario. Hermano, yo sigo teniendo el sueño de salir campeón, el mismo sueño que tenía a los 15 años cuando empecé a rapear”.
En las semifinales Papo se asentó en ese estilo desfachatado y seguro que tan bien le queda y pasó a la final. Por su parte, Danyelus siguió a puro pulmón y se plantó en la final. En el VIP Dam, Dani, Cacha, Nacho y demás estallaban con cada rima de Danye. Estaba on fire, en un día perfecto para él, donde le salía todo lo que intentaba.
Danyelus se plantó en la final. Memorable retorno
La final fue un reflejo de toda la noche. Sería extraño decir que se disfrutó una final de Red Bull donde no hubo sangre, pero así fue. Papo y Danyelus dieron un espectáculo donde atacarse sobraba por completo. Hubo un par de elementos a destacar: Papo disculpándose con el panorama por sus “estupideces”, disfrutando muchísimo la batalla y la experiencia, y dando un nivel bestial, mejor aún que el de aquella nacional del 2016. Danyelus sacando todo su nivel por el hecho de estar ahí parado, haciendo lo que le gusta, sintiéndose de nuevo en su hábitat. El lugar que el eligió. Una final bastante paradigmática para la escena del freestyle argentino, que significa mucho en retrospectiva y, quizás, a futuro.
El Misionero dio la despedida del evento frente a un público conforme y todo se empezó a movilizar. Nosotros nos quedamos merodeando por Niceto, sabiendo que iba a estar la posibilidad de entrevistar a algún protagonista: Danyelus accedió a unas preguntas con una felicidad indisimulable. No por nosotros, claro, sino porque todavía no bajaba a la realidad de lo que había logrado minutos atrás. Así, saludándonos con Danye, colegas y conocidos, cerramos la cobertura del primer día en Niceto.
Mañana saldrá la segunda parte: Regional Buenos Aires día 2. Además, en la semana se estarán subiendo las entrevistas a Danyelus, Beelze, Cacha y Nacho.