FMS LATINOAMÉRICA: LUCHA DE ESTILOS

Con la segunda temporada inaugurada en Argentina y el debut de Chile y México, los países latinoamericanos dan la bienvenida al formato de Freestyle Master Series ¿Qué diferencias más destacables hay entre ellos, qué puntos de contacto los unen? Estas primeras fechas ya han dejado sobre el tablero mucho que analizar.

Por: @jdiez08

Un nuevo formato

El ambicioso proyecto de Urban Roosters en el que los diez mejores participantes de cada país compitieran en una liga profesional tomaba forma física en el antiguo continente. España, fue el país escogido para que la FMS tuviera su debut, el tremendo éxito de la competición y el de todos sus elementos hizo que no solo fuera renovada para una segunda temporada, sino que el equipo de UR cruzara el charco para instalarla como primer destino en Argentina.

Lo que en un principio tuvo un arranque a medio gas, solo fue un pequeño espejismo de lo que depararía la liga argenta, según avanzaron las primeras jornadas, se superaron con creces tanto las expectativas como la repercusión que ya se había producido en España. Este recorrido in crescendo culminó con una última jornada en la que más de dos millones de espectadores se citaron en tan solo las primeras 24 horas desde su retransmisión.

Un hito tan grande, puso encima de la mesa una escena que necesitaba expandirse, todo el panorama hispano alzaba la mano pidiendo una FMS en su país. Esta vez, los elegidos fueron Chile y México, dos de los países más raperos contarían por primera vez con una liga nacional de freestyle y en este mismo mes de abril hemos presenciado su debut.

 

Antecedentes y debut

Cuando Freestyle Master Series llega a Argentina, la escena se encontraba en una gran pausa tras el cierre de El Quinto Escalón; muchas de sus figuras habían dado el salto a la música y, por ende, el abandono a las batallas, sus estrellas sobrevolaban el retiro, y el público, se encontraba en una curva descendente tras el fin del movimiento freestylero más exitoso de la historia en la cultura urbana del país.

En un país con tal pasión por el freestyle, la FMS supuso una inyección de energía, sus grandes participantes volvieron a brillar y muchas promesas se consolidaron en esta competición. Al contrario, para Chile y México este arranque no ha supuesto ese empujón ya que esta liga ha llegado en una época dorada para ambos países, competiciones como DEM Battles o El Club de la Pelea tienen más activo que nunca el panorama del freestyle y es por ello, que ambos debuts han colgado el cartel de sold out en escenarios tan importantes como el Caupolicán y el Circo Volador.

Una pequeña muestra de lo que nos espera

Si bien es cierto que tan solo hemos podido disfrutar de la primera fecha tanto en México como en Chile y no podemos sacar conclusiones inamovibles, bien analizaremos los elementos más significativos que se han apreciado entre los tres países latinoamericanos anteriormente mencionados. También cabe mencionar que no disponemos de la evolución que muchos de los participantes sufren debido a la obligada adaptación al formato y a la necesidad de sumar puntos, pero aun así es interesante ver sus diferencias y similitudes con esta pequeña muestra.

Presente ha estado el debate de España vs Argentina, tanto en redes como en la prensa del freestyle; en esta lucha de estilos, podemos entrever cómo el ingenio de los españoles se complementaba con el flow de los argentinos, pero ¿cuáles son las mayores diferencias con la introducción de estos dos nuevos países?

Mismo continente, diferentes estilos

Uno de los elementos que hacen que la liga argentina sea una de las más dinámicas es su gran diversidad de estilos, los diez participantes forman un conglomerado heterogéneo en el que encontramos artistas con perfiles muy marcados y diferentes, aunque si preguntamos a gran parte del panorama llegaremos a un elemento común, el flow. Los argentinos cuidan con ahínco este factor en las batallas, sonar bien encima de la base es la prioridad tanto por el público como por las figuras profesionales (jueces y participantes) y este rapeo adictivo es una de los puntos diferenciadores a la hora de su repercusión ya que en casi cuatro horas de batallas el oído sigue disfrutando.

La importancia de las DEM Battles en Chile ha dado el salto al escenario, su influencia es innegable y es que tanto los representantes del under chileno como sus mayores estrellas son habituales en las plazas, la coherencia a la hora de rapear se impone por encima de lo demás, no dejar barras de relleno y sí adornarlo mediante técnicas o métricas son los mayores aciertos de los que se puede disfrutar en esta liga.

En contraposición, en México sí vemos una mayor diferenciación entre los artistas ya consagrados internacionalmente con un estilo más completo y los representantes de la calle que han debutado con fuerza y proponen otras técnicas para llegar al destino común, el punchline; los raperos mexicanos se caracterizan por esta agresividad que ejercen sobre el rival y han sido capaces de convertir cualquier ronda del formato en un arma para llegar a los minutos de sangre, sin duda muy diferente a las otras tres ligas.

Desde el punto de vista competitivo también vemos diferencias, si en México la verdadera lucha se encuentra en el descenso y en ver quién es capaz de batir a la cabeza destacada; en Chile y Argentina a pesar de tener a sus grandes favoritos, cualquier participante en un buen día puede quitarle la victoria, éste, es un elemento que alimenta la chispa por la lucha en la clasificación jornada a jornada.

 

El tridente diferenciador

Por último, algo que explica en gran éxito obtenido en Argentina sin duda es el tridente formado por su “fan base”, quizá la mayor del panorama, acompañada de Zone y Misionero; la combinación entre estos elementos hace que todo se vea potenciado, la pasión y el rendimiento de los participantes se incrementa y hace que cada evento luzca con un brillo especial.

En Chile y México tan solo hemos tenido unas pinceladas y aún es pronto para definir si se combina tan bien como en Argentina o sigue necesitando ajustes como hemos experimentado en la FMS española, ya que una jornada es una muestra escasa para establecer una buena conexión entre DJ y Speaker, aunque eso sí, el público no ha dejado de pisar el acelerador.

 

Un futuro prometedor

Tras todo lo analizado, el panorama de Freestyle Master Series se erige como una de las competiciones que más alegrías nos dará durante el año, que llenará cada fin de semana el freestyle hispano hablante y ojalá, siga en la cresta de esta ola que sigue creciendo en cada jornada y que ofrece mucho para disfrutar y tanto para analizar.