LANCER LIRICAL: ”ESTOY PENSANDO EN PARTICIPAR EN RED BULL PERÚ”

El principal referente del freestyle venezolano durante esta temporada, Lancer Lirical, ha alcanzado un punto clave en su carrera recientemente, en el cuál se mantiene. El triunfo en la competición No se aceptan pollos propulsó su repercusión, situándolo de pleno en la Final Internacional de Red Bull Batalla de los Gallos 2016 en Lima. Posteriormente, el venezolano se reivindicó en la competencia internacional Doble AA, en la que exhibió un nivel de calibre internacional logrando batir al bicampeón Jony Beltran. En estos momentos decisivos en el panorama competitivo, el MC comparte con El Estilo Libre sus proyectos, ambiciones y opiniones sobre la actualidad de la cultura freestylera. 

A su joven edad,  ha sido Internacional de Red Bull. Lancer Lirical entró en la lista de los dieciséis participantes del pasado año, y a pesar de ser un desconocido para muchas personas, alguno de los entendidos ya le posicionaban como una posible revelación de dicha competición. En esta ocasión no pudo demostrar su alto nivel y estilo tan personal que le caracteriza. Sin estar acostumbrado al público masivo, los nervios le consumieron y no le dejaron destacar.

Sin embargo, un año después  el gallo afirma estar preparado para resarcirse, aunque esta vez parece que su camino no pasa por su Venezuela natal. Que el público peruano esté atento.

¿Cómo empezaste en esto?

Hermano, yo empecé en esto simplemente porqué un día, estaba yendo por la calle y vi unos muchachos freestyleando. Yo no sabía que se llamaba freestyle ni nada, ni que era, yo solo hacía poesía en la escuela. Entonces decidí integrarme porque lo que vi me hizo enamorarme de esto. Y desde ese momento hasta ahora.

¿Pero tu conociste de antes el rap, o conociste el rap por entrar en el freestyle?

Yo conocía el rap, pero fue el freestyle lo que me hizo entrar. Pero el freestyle, no las batallas. Digamos que fui MC primero y luego conocí las batallas. Fui a un evento de rap normal en el que pensaba que se iban a presentar artistas y terminaron haciendo batallas (risas).

¿Y esto sobre qué año fue?

Sobre el 2008 fue cuando conocí esto.

¿Había en ese momento una escena potente de freestyle en Venezuela?

Cuando yo me integré, ya sí había una escena más importante de freestyle. Ya la gente estaba viendo los vídeos fuera y estaba empezando el auge, que la gente veía raperos como Sumer. Cuando yo me integré, nadie me conocía, y me empezaron a conocer sobre el 2015, porque me empecé a apuntar a batallas super pequeñas.

¿En tus inicios tuviste alguna referencia a la que te quisieras parecer?

En canciones, Cancerbero me inspira bastante. Pero en batallas, fíjate que yo quise crearme un estilo que nadie tiene, y hasta ahora me ha funcionado (risas).

¿Y cómo definirías ese estilo?

Es táctico, muy muy táctico. Con cada oponente tengo una manera de rapear y eso me gusta hermano. Me gusta adecuarme a las situaciones.

¿Pero puedes decirme un punto fuerte, o que es lo que más te guste hacer?

Me gustan mucho el flow y las técnicas, pero no me gustan nada los recursos bajos, ‘berretines’, o tirarme por lo básico.

Desde que empezaste, ¿Cómo ha cambiado la escena venezolana en tu opinión?

El cambio ha sido más que todo en el contenido. Antes se tiraba mucho de tu mamá, tu abuela, tus ojos, tus defectos… ahora el contenido se ha hecho más complejo. Si me  dicen algo de Beethoven, yo le respondo que hago música sin mirar como él lo hacía, ¿me entiendes?. La gente amplía conceptos y me sorprende. En eso ha evolucionado, de pasar al chiste, al contenido.

¿Y por qué crees que ha cambiado la escena de esa forma?

Yo creo que es tanto por influencia del exterior,  como del interior, porque si ves las batallas de fuera, no se manejan tantos los recursos de madres. Entonces allá (Venezuela) había raperos famosísimos que hacían técnicas pero seguían con la misma temática. Era como el punchline seguro si se tiraban personales. Ahora como fuera ya no se tiran personales, se empieza a tener más contenido.

¿Cómo fue tu primera batalla?

Mi primera batalla fue horrible, hermano (risas). Fue en una plaza, con unas doscientas personas. Me tocó con un ‘loco’ que se llama Indriago, que es evangélico, y me empezó a tirar puro chiste. La gente se volvía loca y se reía: ¡Ah, el gordo, el gordo! En mi segunda batalla, paso a segunda ronda. En la tercera gano, y gano como seis batallas seguidas y luego fue como un  intérvalo de perder y ganar, y ahí fue cuando la gente me empezó a conocer, por ganar a gente como Anestia, y decían: ‘Mira Lancer lo que está haciendo’. Y así llegamos a la Red Bull.

El under ha sido muy importante en tu carrera, por lo que me dices. ¿Qué importancia le das al underground en tu formación como MC?

La actitud que tengo ahora me la dio la calle, hermano. Eso de querer ser más que el oponente, desde un concepto de respeto, me lo dio la calle.

Antes has sacado el tema de tu primera Red Bull en 2015 ¿Qué experiencia sacaste de tu primera aparición en la competición?

Uf, eso fue criticadísimo. Mi batalla fue polémica porqué me tocó con un chico que se llama Pipo Martínez, en la que todo el mundo decía que yo le había ganado. De hecho el vídeo tiene como más dislikes que likes. La batalla se conoció cuando yo gané al año siguiente y la gente decía que podría haber representado ese año a Venezuela. Fue una experiencia mala. Fue la única vez que he llorado en una competencia cuando perdí.

Entonces, ¿Te pareció un poco tongo?

Sí, de hecho es algo que reconozco públicamente.

Polémica batalla que protagonizó Lancer en Red Bull Venezuela 2015.

¿Por qué decidiste apuntarte a la Red Bull en 2015?

Llegó la noticia de parte de Ramses Meneses (McKlopedia) de que van a hacer una batalla que se llamaba No se aceptan pollos, que esa es la Red Bull de Venezuela, como una sucursal pequeña de Red Bull para sacar al campeón venezolano. Me dijeron que iban a hacer audiciones presenciales. Yo no entendía que eso iba a ser tan importante. Yo lo veía como ‘ah, va a ser una competición más’. Llego, audiciono, a la gente le gustó lo que hice e hicieron como un top de audiciones en la que quedo como el puesto 12 creo.  Clasifico, me llaman y cuando me dicen que era de Red Bull para sacar un campeón para la internacional, dije: ‘esto me lo llevo’. En 2016 fui con otra actitud, no de ganar porque sí, si no de dar lo mejor de mí y quedé en el puesto número uno de las audiciones.

Luego un año después, llegas a la competición y te la llevas ¿qué cambió en tu estilo y en tu persona con respecto al año anterior?

Fíjate que en el 2015 yo iba con la actitud de que iba a ganar. En 2016 fui al contrario, diciendo voy a dar lo mejor, gane o no, y vamos a ver lo que pasa. En la primera ronda lo hice fatal pero le gané a un muchacho. Paso la segunda, e iba subiendo el nivel cada ronda. En la final ya tenía la confianza en la mano y ahí dije: ‘voy a ganar’. Me lo propuse y acabé ganando. Yo creo que la actitud de voy a ganar antes de tiempo es muy mala.

Y después de salir campeón, ¿cómo te sentiste? ¿Fue un sueño realizado?

Sí, hermano. Yo lloré en semifinales cuando gané al competidor más duro de la lista. Lloré como diciendo: ‘ya pasé, voy a la final’. En la final me tocó contra un gallo que había eliminado a muchos grandes nombres y lo di todo:  gané. Me quité un peso de la espalda.

¿Y con qué expectativas fuiste a la final?

A la internacional fui con mucha mucha fuerza, lo que no hice en Red Bull Venezuela, pero a diferencia de la competencia nacional, en la que entrené algo antes, en la internacional nos pasamos toda la semana tirando muchos frees, pero no para entrenar, si no para pasar el rato. Todo eso me afectó bastante, acabé muy fatigado, y llegué sin práctica a la competición. Además no estaba acostumbrado al público, porque en Venezuela había 200 personas, en la internacional había 30.000. Una experiencia nueva, ahora controlo más los escenarios, pero en ese momento nada.

En los momentos previos a la internacional, algunas personas influyentes del panorama como Kapo 013, declararon que podías ser una de las revelaciones de la Internacional, además de muchas personas del público ¿Te llegó a meter presión o simplemente ni lo llegaste a escuchar?

Sí, lo llegué a escuchar, de Kapo y de algunos freestylers que estaban en mi entorno. Fue presión en su momento porque dije: ‘estas personas confían en mí, y si pierdo…’. De hecho cuando perdí, me decían tienes que seguir inscribiéndote en otras competencias porque a ti lo que te mataron fueron los nervios.

¿Y cómo te ha ido después de la internacional en cuanto a la llamada de competiciones para que participes?

Después de la Red Bull, la primera organización que me habló fue Batalla de Maestros, diciendo que fuera para la BDM Deluxe de Chile, pero tuvimos un problema con el vuelo y no pude llegar. En 2016, me hablaron ‘Dragones del Freestyle’ de Perú, que es por ellos por los que estoy acá, ellos me trajeron, y esta fue la primera competición internacional. De ahí he ido por eventos pequeños, haciendo audiciones, siendo jurado que me invitaban de organizaciones pequeñas y yo aceptaba, etc. Luego vino Double AA, que es la última competición que tuve, que aunque no me invitaron yo mandé mi vídeo por entrometerme, y me cogieron (risas). Ahora estoy viendo cómo van a ir las demás competiciones.

Hablando de Double AA, que puede ser la competición más importante aparte de Red Bull en la que has participado ¿Personalmente, como te fue esta segunda vez participando en una competición internacional?

Fue muy diferente porque esta vez iba con otra mentalidad, diferente. Además me dio más seguridad porque al no ser Red Bull era otro público, con menos personas. Había mucha gente que estuvo conmigo en la internacional (Red Bull) que me decían que aquí podía hacer algo, que hiciera una buena batalla por lo menos. Yo creo que salió mucho mejor por la actitud con la que fui y por la experiencia que ya tenía de Perú.

¿Y contra Chuty que tal te viste?

Me achiqué mucho hermano. Me hizo sentir pequeño y yo me decía: ‘¿por qué?’. Pensé simplemente en hacerlo bien e intentar dar un buen papel para que no dijeran que Lancer se había asustado, pero no fluyó y no se puede hacer nada. Es diferente por ejemplo enfrentarte a Jony B que a Chuty, y eso que Jony le ha ganado.

¿Y por qué fue diferente enfrentarte a Chuty que a Jony?

Porqué yo creo que el hecho de que yo conozco a Jony, de que es mi amigo y hablamos y dije: ‘Venga vamos’. A Chuty no le he tratado tanto, es mi amigo en cierta manera, pero no hablamos tanto, no tenemos comunicación, y ese hecho de que no le haya conocido más personalmente me pareció como más intimidante. La batalla se la llevó el completamente, para mí no había réplica.

Hablando un poquito ya sobre el futuro, me has comentado que no tenías muy claro Red Bull 2017 ¿En qué estás pensado?

Estoy pensado en presentarme en Perú. Si me dan la oportunidad, quiero participar aquí. No está en mi mente participar en Venezuela, porque lo que ha sucedido en Red Bull Venezuela con los campeones, como Inmigrante, no me gustó. A él en primera ronda le tocó con un chico llamado Gaviria el año pasado y para mi ganó Inmigrante muy muy claro. No quisiera que me pasara eso, porque le haría mucho mal a mi carrera. Para mi Inmigrante es el mejor batallero de Venezuela. Ahora estoy viviendo en Perú y espero que me dejen participar acá.

¿Y cómo te planteas el cambio de público?

He estado practicando mucho acá. He estado yendo a muchos eventos acá en Perú, ganando en algunas plazas, llegando a las finales, perdiendo también. Y estoy entendiéndoles (al público) primero, porqué no sé, en ocasiones te gritan una rima súper complicada, y luego les tiras otra rima súper complicada y no lo entienden. Entonces estoy intentando conocer al público peruano, entendiéndolo primero. Quizás no quieran, por algo de nacionalismo, que un venezolano gané la nacional de su país, pero espero por lo menos llegar a la final y que me tomen como segundo puesto, y si hay votaciones, y se arma polémica por el hecho de que haya llegado a la final en otro país, quizás nos veamos en México, hermano (risas).

¿Tienes ya observados a los competidores que te pueden salir en Perú?

Sí, de hecho, aquí en Trujillo, que es donde vivo, creo que están los mejores del país. Esta un muchacho que se llama Leo que quedó subcampeón de ‘Dragones del Freestyle’ que es buenísimo. De Lima está Nekross, que es buenísimo. Hay gente que tiene mucho mucho nivel, pero voy con la intención de ganarles a todos. (No se menciona a Jota porqué este gallo ya está clasificado para la internacional).

Entonces, ¿te ves con fuerza para llegar lejos en Perú?

Sí, si en tal caso de que no llegara lejos, hice lo posible. En realidad Red Bull no está en mis planes este año, pero lo tomé como algo muy personal. Dije: ‘Si en esa competición lo hice mal, y en otras no, debo reivindicarme en ese lugar’.

¿Tienes algún proyecto más a largo plazo?

A ver, tengo Vandal Fest, que es una competencia de acá de Perú parecido a God Level, que va a haber mucho nivel, con Sony, Jota, conmigo… no me acuerdo de todos pero somos ocho. De BDM hay una propuesta muy muy lejana de BDM Deluxe internacional, porqué no hay representante de Venezuela. Me han dicho que me pagan los pasajes a México y desde mi punto de vista es una buena propuesta porqué es una gran competencia, podría vivir la experiencia BDM que no la he vivido nunca, conocer otro país…

Ya para acabar, ¿Hasta dónde te gustaría llegar es esto del freestyle?

A ser el mejor del mundo, esa es la meta. No será este año, ni el que viene, pero vamos a luchar por ello, hermano. Esa ha sido mi meta desde que empecé, y voy caminando para conseguirlo.