GOD LEVEL: LA TEMPRANA CAÍDA DE LOS FAVORITOS APRIETA LA LUCHA POR EL CAMPEONATO
Tras la publicación de la tabla tras la primera fecha de God Level en Argentina, los favoritos se encuentran en la parte baja, algo que habla tremendamente bien del nivel competitivo y la lucha que se vivirá por alzarse con el torneo en el mes de enero.
Por: @ikerkapero9
Después de la God Level Argentina podemos concluir que cuando se concentra tanto talento bruto, los favoritismos dejan de tener fuerza y se derrumban contra la energía de aquellos que no ocupaban demasiados lugares en las quinielas. Si hablamos de experiencia, las duplas Chuty-Aczino y Papo-Skone tenían todas las papeletas de llegar muy lejos. Sin embargo, el desenlace fue exactamente lo contrario y solo la primera dupla pudo pasar una ronda en la competición.
Puede gustar más o menos que los favoritos sufran el hándicap de “matagigantes” en sus rivales, pero lo único evidente es que la clasificación ahora está más abierta y emocionante que nunca.
Las primeras posiciones son ocupadas por las duplas Stuart-Jaze, Trueno-Letra y Zaina-Mecha, con 4750, 4250 y 2500 puntos respectivamente, haciéndose notar la ventaja de los que actuaban en casa. Después se colocan Kaiser y Lobo Estepario con 2000 puntos, con 1000 puntos de ventaja mínima sobre el resto.
Visto esto, aquellos que no han conseguido ganar ninguna batalla como los Walls-Force, Cacha-Dominic, Papo-Skone o Lit Killah-Zasko parten con una desventaja brutal sobre los más galardonados. Esta presión sobre los favoritos hace que la God Level esté más emocionante que nunca, ya que cualquier error puede desembocar en el fracaso más absoluto.
Un factor determinante y vital en los cruces son los emparejamientos entre los mayores aspirantes al título. Por ejemplo, si la pareja Chuty-Aczino sale ganador en la próxima edición de Perú ganando en cada respectiva ronda a las tres primeras duplas que conforman el podio, se aseguran superar en la clasificación a estos tres, colocándose en la primera posición con gran probabilidad.
Con este breve ejemplo podemos comprobar como pueden engañar las distancias. Por ello, cada ronda de la God Level se vivirá como una final, ya que cualquier error se pagará muy caro. Ahora solo toca esperar y que Perú haga el resto en una segunda edición que lo tiene todo para ser un éxito absoluto.