EL CAMINO DE LOS DEBUTANTES: DYBBUK
A falta de 11 días para la final nacional de Red Bull en Argentina, la organización madre de las batallas de gallos reúne, por un lado, grandes exponentes de la escena y, por el otro, 8 debutantes que verán su oportunidad de llegar a la gloria. Desde El Estilo Libre repasaremos el camino de cada uno de ellos. Hoy, es el turno de Dybbuk.
Por: @TMarinkovichOK
Sin dudas, las impresiones que generó Dybbuk en la segunda regional realizada en la capital argentina, fueron más que positivas. No llegaba como candidato a obtener el cupo, pues delante suyo tenía a varios MC’s de renombre y de mayor participación en las principales competencias de escenario. Pero una vasta experiencia en plazas y eventos underground (como el finado Quinto Escalón, Irlanda Freestyle, o Madero Freestyle, entre otras), le brindaron la capacidad de anteponerse a varios favoritos, y lograr un excelso segundo puesto.
La travesía comenzó en octavos de final frente a Skarz, ronda clásica a minutos ida y vuelta, con palabras cada 10 segundos. Le tocó empezar respondiendo, y de arranque mostró mucha actitud sobre la tarima, ejecutando los punchlines con mayor efectividad que el marplatense. Conectó rápidamente con el público de Niceto, a base de frases correctas bajo los conceptos que se dilucidaban en la pantalla gigante. Ante esta solidez, su rival titubeó en varias ocasiones, sumado a la imposibilidad de poder encender al aforo. Aquellos hechos implicaron una victoria unánime para Dybbuk.
En cuartos de final el rival fue Shair, que venía de eliminar a Tink en la instancia anterior. La modalidad fue como la primera ronda, pero libre de temáticas. Le tocó dar comienzo a la batalla, con 60 segundos en los que intercaló buenos acotes, con otros de nivel regular. Su contrincante, en los dos minutos siguientes haría gala de su flow, pese a no emitir barras de gran calibre y responder poco. Dybbuk cerró la ronda con irregularidades, con un buen inicio y un desinflado cierre. El desempeño de ambos provocó que dos jurados (Dtoke y Wos) sentenciaran una réplica, mientras que el restante (Tata) se inclinara hacia Shair. El desempate fue a dos minutos de 4×4, en los que el protagonista de la nota fue más incisivo en el contenido de sus barras, mientras que su contraparte no pudo contrarrestarlo debido a dobles-tempos mal ejecutados sobre el final de la ronda. Sería otra resolución unánime a favor, de parte de los jueces.
Ya en semifinales, la clasificación a la nacional estaba a la vuelta de la esquina, sin embargo el oponente era Klan, uno de los mayores candidatos a la victoria regional. Otra vez, como en cuartos de final, se batalló dentro de los clásicos minutos de ida y vuelta, libres. Dybbuk dio nuevamente comienzo al enfrentamiento con un flojo minuto. El de Crotos Crew se desempeñó de manera regular. Dybbuk cerraría el round con efectividad, reponiéndose a la performance antes mostrada. Dtoke, Wos y Tata indicaron réplica. El desempate mostró a un Dybbuk apoyándose en tratar de producir impactos a partir del contenido de los punchlines, y a un Klan avocado a ganarse al público mediante su grandiosa puesta en escena. Ambos cumplieron sus objetivos de manera disforme, y los jueces interpretaron nuevamente un empate, cruzando sus brazos. En la instancia definitoria, Dybbuk mantuvo un buen desempeño a lo largo de los 120 segundos, mientras que el subcampeón argentino de 2017 poco a poco iría menguando su nivel. Así, los tres jurados dieron como vencedor al del oeste bonaerense. Con la victoria, éste se aseguró el cupo en la Final Nacional de Argentina, a falta de una contienda.
La final enfrentó dos premisas dispares, el hambre de bicampeonato regional de Nacho, ante la conformidad de haber logrado la clasificación a la nacional -por parte de Dybbuk-. El primero de ellos dio arranque al enfrentamiento. Como era de esperarse, sus ansias fueron respaldadas por punchlines certeros, que impactaban ante un rival que -como se dice en esas tierras- “ya estaba hecho”. Dybbuk respondió por el simple instinto que te otorga el ejercicio de la batalla, pero sus líneas demostraban el sentimiento expuesto anteriormente: “Ya gané la Champions League, ¿para qué quiero un amistoso?”. Su imagen desaparecería acote tras acote, mientras que Nacho no levantó nunca el pié del acelerador. Aquello derivó en que este último se llevase nuevamente el primer puesto regional.
De cara a la cita en el Estadio Luna Park, el sábado 4 de agosto, se decantan distintos aspectos a tener en cuenta en Dybbuk. Éste ha demostrado que el paso de la plaza al escenario no es un problema. Se ha desenvuelto de manera correcta, actuando bien sus barras, y sin muestras de intimidación ante un público que supere las mil quinientas personas (esta regional y algunas participaciones en la última etapa de El Quinto Escalón). Comparte pros y contras con la mayoría de los que debutarán en finales nacionales.
A favor tendrá la menor exposición a la que se sujeta su carrera, por lo que muchos adversarios tendrán dificultad en la composición de punchlines hacia él. En contra, se puede mencionar la disparidad de experiencia en estas instancias, si se lo compara con freestylers de la talla de Papo, Danyelus, Nacho, o Dozer, entre otros. En el lapso temporal entre que se clasificó, hasta estos días, Dybbuk siguió participando de eventos en las plazas, entre los que se destacan buenas actuaciones en Misión Hip-Hop (se ubica en los primeros puestos de la tabla).
Sin lugar a dudas, representa una buena alternativa a los favoritos de siempre, pero al igual que en la previa a los sucesos dados en Niceto, no parte como candidato principal. Otra vez le tocará jugar con el factor sorpresa, con la certeza de que ya le ha dado resultados favorables en una ocasión.
