A 15 AÑOS DE LA MUERTE DE J DILLA

Por: Gabriel Baggio (@ShadeOfWhy)

En todas las disciplinas, cada cierto tiempo aparecen personalidades que destacan sobre el resto. Hay varios motivos para esto: introducir una innovación, dejar un legado o llevar su juego al siguiente nivel son algunos de estos. J Dilla es una personalidad que encarna todas estas cuestiones. En la misma semana se cumplen sus dos aniversarios: nació un 7 de febrero y falleció el 10 del mismo mes, con 32 años de diferencia. Este año se cumplieron 15 desde su fallecimiento, tras una vida dedicada enteramente a la exploración musical.

James Dewitt Yancey fue “descubierto” por un allegado de Q-Tip, miembro del legendario grupo A Tribe Called Quest, donde sería incorporado al equipo de producción. Con esta experiencia, y una marcada influencia del jazz, el soul y el blues, formó a los pocos años una de las bandas más legendarias de la historia del Hip-Hop: Slum Village. Quizás el álbum más icónico de esta etapa sea Fantastic Vol. 2, publicado en el año 2000. El sonido de este disco, que pasó casi en su totalidad por la mente y las manos de Dilla, es muy característico y hasta la actualidad es considerado como objeto de estudio y enseñanza de la música. Algunas técnicas y herramientas que hoy son de uso diario por parte de gran cantidad de productores y beatmakers fueron puestas en escena por primera vez gracias a la mano de Jay Dee. Un ejemplo de esto es la no-cuantización de los breaks y loops de batería, muy presente en las canciones de Fantastic Vol. 2. Esta forma de crear y reproducir las baterías es, hoy, utilizada frecuentemente como una manera de humanizar los beats y dotarlos de un groove especial.

Según una gran parte del público y la crítica especializada su obra máxima fue su último disco, Donuts. Compuesto y producido en su totalidad por Dilla desde la cama del hospital, este disco está dotado de una suerte de “mística” particular, y es considerado como una de las grandes joyas de la historia del beatmaking.

Quizás un hecho en principio anecdótico sirva para retratar la verdadera importancia de Dilla para la historia de la música y de la cultura: su samplera y su sintetizador de cabecera, una AKAI MPC3000 y un Minimoog Voyager, se encuentran expuestos en la muestra permanente del Museo Nacional de Historia y Cultura Afroamericanas.

J Dilla cambió la historia de la música en general, y del Hip-Hop en particular. Su legado se encuentra presente no sólo en sus propias obras, sino también en las manos y sampleras de casi todos los productores de la actualidad.