KINGDOM: NO HAY NADA COMO VOLVER A CASA
Pocos días después de superar la ‘resaca’ que dejó Pangea, el epicentro del freestyle se trasladaba a Perú para acoger la final internacional de Kingdom. Cambió el escenario y cambiaron los protagonistas… o casi todos. Cacha volvió a una final y Skone volvió a ‘casa’ para conquistar un nuevo campeonato mundial.
Por: @davidtimon_
No hay nada como volver a casa. Pero, ¿qué ocurre cuando, casi de forma unánime, la escena mundial del freestyle te reconoce como un valor propio de la cultura (y, de paso, uno de los mayores exponentes históricos jamás habidos)? ¿Cuál es tu lugar? ¿Dónde está tu sitio? ¿Puedes llamar ‘casa’ allí donde te consagraste leyenda alzando el título más prestigioso que existe? Posiblemente Skone se hizo estas y muchas otras preguntas de camino a Perú. A ‘su’ Perú.
Allí, en la Final Internacional de Kingdom al malagueño le esperaban caras conocidas: desde Cacha, reciente campeón de Pangea junto a Dominic, hasta Teorema, pasando por Gaviria, Ken Zingle, Lesco o un enorme elenco de participantes nacionales comandados por Nekroos, Strike o Jair.
A las bajas de Dominic, Acertijo o Yartzi en los días previos a la celebración del evento, se sumaron la caída de todos de los representantes internacionales en la primera ronda de octavos de final. El ecuatoriano Lesco cayó ante Lateral y los venezolanos Ken Zingle y Gaviria hicieron lo propio ante Nekroos y Jair, respectivamente. Solo el español y un Cacha que vive en un estado de inspiración permanente superaron el primer corte para quedarse ‘solos’ ante la élite peruana. El argentinó tumbó a Els y Skone hizo lo propio ante un entregado Papicha, al que por más ganas que puso aplastó haciendo las delicias de un público que ya empezó a sentir como suyo.
Pasando a la ronda de cuartos de final, en los duelos ‘nacionales’, Nekroos demostró porqué es uno de los principales representantes de su país, ganando a Jair. Stick siguió sus pasos en su turno contra Strike. Antes Cacha ya se aventuraba en sus (acertadas) predicciones para invertir las primeras barras de su batalla ante Lateral para emplazar a Skone a una cita en la final: “¿Cómo estás, hermano? ¿Cómo estás, bro? Entre nosotros dos hoy sale el ganador”. Aunque no logró llegar al nivel de Cacha, sobre todo en la respuesta y en el rapeo, el peruano tampoco fue desencaminado en su ejercicio de adivinación: “¿Entre ustedes dos hoy sale el ganador? Huevón, es Skone. ¡Tú no!”.
Y Skone se empeñó en demostrar que ni unos ni otros iban desencaminados. Con una actitud que durante todo el evento aunó en un mismo cuerpo una pose de soberbia desmedida, consecuencia de la tranquilidad y el poso que solo otorga la experiencia, y la percepción de la incalculable diferencia técnica frente al resto de competidores, el malagueño jamás dejó cabida a la desconcentración. Tranquilo, fluido, sereno y relajado pero hiriente, vacilón y dañino como siempre. Ghost ofreció el nivel suficiente para llevar la batalla al término “competición” pero no el necesario para competirla. Skone estaba imparable.
Semifinales. Stick tampoco pudo con Cacha, que con la victoria certificaba su pase a la final y se aseguraba un nuevo podio internacional. Desde el subcampeonato de la Ghetto Dreams League, el bronce en Sangre Inca y el campeonato de Pangea hasta el escenario de Lima. Skone, si querías una revancha, la tenías servida.
Antes estaba Nekroos. Tras un minuto conectado y fluido del peruano, Skone tuvo que reponerse a una trabada inicial… y lo consiguió en su segunda intervención. Coherente e instantáneo, Skone rescató una réplica que el local mereció justamente. Y en la que se reivindicó, aceptando un intercambio de respuestas constante en el que, esta vez, Skone se encendió lo suficiente para apuntarse la diferencia.
La final estaba aquí. Cacha y Skone se veían solo unos días después de su cara a cara en la primera réplica de las semifinales del ya famoso torneo por parejas. “Me tongaste en Pangea, no me da envidia. Esto no es una final, esto se llama justicia”, arrancaba Skone en una ronda que seguiría con Teorema, del lado del español, y Strike, apoyando al argentino confirmando que la inclusión de los formatos por equipos ya ha reconfigurado el formato de las competiciones.
Por lo demás, la batalla siguió unos derroteros que Cacha difícilmente pudo controlar. Skone, querido y aclamado como el mito que es en el arte de las batallas, está, por fin, donde su talento, trayectoria y personalidad merecen. Ya saben lo que dicen. La venganza se sirve fría, pero, con el cariño del público, el malagueño estaba más caliente que nunca. No hay mayor calidez que la que uno encuentra en casa. Skone, vuelve siempre que quieras, porque el freestyle es tu casa.