Mega MC: “Estoy buscando reencontrarme con esa parte de mí que le emocionaba competir”

Por: Carlos Díaz Rincón

Foto de portada vía Red Bull Batalla

Esta entrevista fue realizada previa a la nacional de Bogotham Freestyle, en la que Mega consiguió el segundo lugar tras caer en la final contra el venezolano Ken Zingle.

¿Qué tal estuvo la fecha en la que te clasificaste en KND? ¿Ya ibas mentalizado en conseguir el cupo para esta nacional?

La verdad estaba en una época en la que no estaba compitiendo en plazas y no quería ir. Solo fui porque un amigo me insistió que fuéramos y yo no sabía nada del premio. Yo dije, “bueno, vamos a ir a rapear”, y la verdad arranqué sin muchos ánimos. Luego en semifinal fue que supe que el premio en la nacional era una moto y yo dije, “bueno, vamos a intentarlo” y clasifiqué.

¿Por qué no estabas compitiendo en plazas? Tú eres una persona habitual allí.

Últimamente he sentido que las plazas tienen un ambiente un poco pesado, un poco tóxico. Y aparte de eso, considero que, más allá de entrenar en las plazas, no hallo ningún beneficio para mí porque siento que es demasiado esfuerzo por muy poca recompensa.

Hace poco entrevistamos a Chang antes de la Internacional de Red Bull y nos hablaba del efecto David contra Goliat en las plazas. Decía que con la gente que ya tiene un nombre establecido a nivel nacional, se genera más presión. ¿Tú lo has vivido de esa manera?

Bueno, yo creo que Chang hasta ahora se da cuenta de algo que nos dimos cuenta hace como cinco años. Ahora no sé cómo irá el proceso en Medellín, pero aquí la vaina ha evolucionado al punto de que cada plaza tiene su parche. Usted va allá y quieren hacerlo perder con el freestyler de su parche para hacer crecer al freestyler de su parche, entonces también se vuelve un poco molesto.

Sobre la lista de Bogotham Freestyle, ¿cómo la ves?

Me parece que está chimba, pero siento que no es muy diferente a una plaza normal, o sea, en una plaza normal los puedo encontrar a todos. Es muy habitual estar en alguna plaza y encontrarse a todos ellos, incluso hay gente de Cali como Pandora o Biggest, o los panas de Ibagué, son gente que uno se los puede encontrar en alguna plaza, como que ellos vengan a algún evento y compitan una semana.

Sobre las expectativas para hoy, ¿cómo estás mentalizado?

La verdad es que no sé cómo decirlo porque no sé cómo sentirme. A veces dirán que de pronto soy algo pesimista, pero es que creo que uno siempre se enfrenta a cosas que no puede controlar, entonces uno es responsable solamente de qué tan bien lo haga y el resto no depende de uno, y ese resto es como el 60%. Es difícil porque a veces uno dice “ah, no le voy a parar bolas, si pierdo, pierdo y ya”, pero eso evita que uno la dé toda. Pero cuando uno la da toda y se compromete emocionalmente, si pasa algo, como que usted pierda por algo que se le sale de las manos, entonces sí se siente feo.

Es como un dilema de “me voy con toda sabiendo que si sale algo mal que no sea mi culpa, voy a acabar vuelto mierda”, o solo rapeo así por rapear y al final cuando pierda voy a decir, “jueputa, pude dar más”. Entonces no sé, es un dilema al que me enfrento últimamente.

Sobre este dilema que también se ha visto muy presente en personas que llevan un recorrido importante, ¿cómo te proyectas para 2025 ya que se está terminando el año a nivel competitivo?

Siempre he tratado de visualizarme haciendo cosas grandes y hasta cierto punto considero que las he hecho, obviamente se pueden hacer cosas aún más chimbas, pero siento que en este momento estoy en otro mood de dos cosas.

Primero, volver a encontrar ganas de hacerlo y últimamente solo he encontrado las ganas de hacerlo cuando viajo, porque me encuentro en un escenario diferente, con unas reglas diferentes, o quizás las mismas reglas, solo que no las conozco. Por ejemplo, hace poco fui a Riohacha y yo no estaba pendiente de “ah, fulanito tal cosa, fulanito hace esto”, solamente fui a rapear y fue una chimba. Entonces estoy buscando la forma de reencontrarme con esa parte de mí que le emocionaba demasiado hacerlo, porque siento que es algo que se pierde cuando uno se encuentra con las mismas personas en casi todos los eventos. Siempre hay unas subtramas muy grandes con cada uno de los parches, de los freestylers, de los jueces. Y a veces siento que empaparme tanto de eso ha hecho que quizás yo no lo disfrute tanto, porque voy predispuesto a muchas cosas.

Y lo segundo es que siento que estoy en un mood también de encontrarme a mí mismo. Yo considero que soy muy completo, es decir, si hay que hacer chistes los hago, incluso este año me gané una batalla de chistes; si hay que ser decente lo hago, y este año me gané una batalla de Verso Diverso, donde precisamente uno debía ser decente; si son minutos, lo hago; si es doble tempo, lo hago; si son dobles sentidos, lo hago; si es 4×4, lo hago; si es respuesta directa, lo hago.

La cuestión es que he encontrado una dificultad en lo que son las variaciones rítmicas y el contenido al mismo tiempo, y eso es algo que quizás desde mi perspectiva he criticado mucho, porque yo me considero más punchliner. Como que a veces veo gente que hace muchas variaciones de ritmo o hace one-twos que yo considero que son sin sentido, y yo digo “mierda, pero no están diciendo nada”. Ahí luego digo, “bueno probablemente esa gente dirá, ‘esta gente que clava punchlines, no hace variaciones de ritmo’”. Quizás estoy en un extremo y defendiendo mi posición.

Por ende, quisiera hacer ambas y yo puedo hacer ambas. Las variaciones de ritmo para mí no son difíciles, el problema es hacer las dos cosas al mismo tiempo, porque siento que nada más las variaciones de ritmo consumen una cantidad de mi memoria RAM. Entonces estoy practicando mucho en eso para que sea demasiado espontáneo y yo pueda concentrarme en lo que voy a decir. Eso fue lo que traté de hacer en Red Bull este año. Considero que me fue medianamente bien en lo que quería hacer, entonces lo que quiero es potenciarlo aún más porque yo sé que lo puedo hacer. Alguien escucha mis temas y dice “mierda, eso no es lo que yo me esperaba del Mega, porque el Mega generalmente es muy cuadrado hablando del ritmo”, porque yo cuido mucho la coherencia.

Claro, desencasillarse también es muy complicado, si un día sacas un muy buen one-two no va a tener tanto impacto que si lo hizo, por ejemplo, Coloso. Me parece interesante esa búsqueda de estilo que condense tus capacidades.

Exacto, yo siento que hay gente que es talentosa y hay gente que es disciplinada. Yo me considero entre los disciplinados, porque ahora veo estos muchachos y al mes ya son muy buenos. A mí me costó cinco años ser medianamente bueno, entonces siempre yo trataba de mejorar, y siento que en un momento me volví tan bueno, es decir, del 2021 para acá, que yo dije “mierda, ya yo no hallo cómo evolucionar”. Siendo sincero, viendo mis peaks, yo le meto sabroso. He ganado en casi todas partes, he ganado en Ecuador, he ganado aquí en casi todas las ciudades, en Perú en nacionales, entonces ahí yo dije, “quizás la evolución al punto en el que estoy no es hacer lo que yo hago mejor, sino tratar de abarcar otros campos”. Quizás la evolución que estoy buscando en este momento no es hacer dobles sentidos más chimbas, porque yo duré mucho tiempo perfeccionando eso; no es seguir perfeccionando el punchline, que ya yo no hallo cómo perfeccionarlo más; sino más bien es saber combinar lo que ya sé con cosas que sí domino pero que no son mi fuerte.

Teniendo en cuenta todo este proceso de búsqueda, ¿hoy vas con la versión punchliner o lo que vaya surgiendo? ¿Cómo te ves?

En estos momentos estoy como en la expectativa. Estoy esperando que pase el primer patrón y una vez pase el primer patrón ya sé en qué momento estoy. Por más bueno que uno sea, no todos los días el cerebro está chimba, entonces si hoy me siento lúcido en la primera, quizás mi mentalidad cambie, eso es lo que estoy viendo. No puedo negar que me gustaría hacerlo bien, pero también me he dado cuenta de que cuando uno se pone excesiva presión quizás no es tan bueno, aunque yo soy bueno lidiando con la presión, pero puede que saque un poco de magia si no me presiono tanto.

Esperemos que salga esa magia, Mega.