EL CAMINO DE LOS DEBUTANTES: NOVA

A falta de 9 días para la final nacional de Red Bull en Argentina, la organización madre de las batallas de gallos reúne, por un lado, grandes exponentes de la escena y, por el otro, 8 debutantes que verán su oportunidad de llegar a la gloria. Desde El Estilo Libre repasaremos el camino de cada uno de ellos. Hoy, es el turno de Nova.

Por: @PabloCalMuriana

Mendoza, como regional, quizá estuvo este 2018 a la sombra de otras batallas como las que se dieron en Córdoba o Buenos Aires; pero no se puede negar que dejó muy buenos momentos para registrar, sobre todo si tenemos en cuenta que fue la ciudad que vio clasificarse a Nova, una de las más gratas sorpresas que Red Bull nos tenía preparadas. Como Dybbuk o Alkoy, partía desde el banquillo del anonimato, sin muchas pretensiones de llegar lejos. Aún así y más allá de prejuicios, solo Peqo Flow, primer clasificado, pudo obstaculizar su rápido ascenso.

Los escasos afortunados que ya habían disfrutado de él en sus apariciones en El Quinto Escalón o A Cara de Perro no se asombraron al ver como expulsaba a Tony de la competencia en los cruces de octavos, con un ingenioso uso de las palabras en pantalla y una solidez más que evidente. La única dificultad que se le presentó fue el tener que resolver una réplica, donde su superioridad no tardó en demostrarse en un ritmo rápido que le hizo venirse arriba.

Comenzó el minuto contra Van Hertz en cuartos siguiendo esta misma línea: contundente, confiado, constante y sin querer dar otra oportunidad de revancha a su rival. Este, con más complicaciones a la hora de fluir, quedó expuesto nada más comenzar su respuesta. La segunda vuelta fue más de lo mismo, con Nova poniendo la guinda a su cada vez más impecable actuación entre los gritos de un público en Mendoza que empezaba a cogerle cariño.

El plato fuerte de la noche vino al enfrentarse a Sub. El chico de la gorra también estaba agitando a toda la sala aquel día, pero nadie esperaba que fuera a ser artífice del mejor duelo del evento frente a un Nova que no se dejó intimidar. Se le vio más nervioso, eso sí, en los primeros minutos, haciendo destacar más a su rival (cierto es que el sonido tampoco le facilitó la tarea). Varió el peso de la balanza al cambiar el turno, con un preciso punchline, toda una fatality, que hizo que el papel del subcampeón cobrara mucha más importancia. La réplica por la que se decidió el jurado solo complicó su voto, siendo una oportunidad más para ambos de subir marchas bien aprovechada. El agresivo beat que dio comienzo a la última sentencia y que tan bien le sentó a nuestro protagonista terminó por decantar la batalla: era, finalmente, nacional.

A la hora de cerrar la velada, se aflojaron los motores. La química entre ambos finalistas, que ya no se jugaban nada, era más que evidente, y aunque Nova siguió dando destellos de calidad, se veía bien claro que su pase al gran cartel le había relajado. Así, dejando una buena última imagen, quedaba relegado al segundo escalón del podio, con su nombre firmado en la inminente final del país.

Digamos que el del segundo clasificado de Mendoza no es un perfil poco común, pero sí efectivo. Tiene sobrado talento para armar sus patrones y efectuar ataques de una calidad muy digna, rara vez afloja el motor y su capacidad para establecer coherencia y adaptarse a las percusiones son claros puntos a favor. Quizá, y como suele suceder con los debutantes, pueda pasar que se vea abrumado allí arriba, en el más grande de los escenarios de su tierra, habiendo pruebas además de que en más de una ocasión el tener demasiado nervio le ha jugado malas pasadas.

Claro está, nadie puede predecir lo que ocurrirá. Cierto es que no se cruzó en su regional con ningún gran nombre, pero demostrado quedó ya que puede contra ellos al vencer a algunos como Tiago en competiciones externas. Puede ser arriesgado colgarle una medalla en el cuello, pero no muy descabellado verle escalando posiciones o eliminando a algún favorito.