EL RAPERO VALTONYC CONDENADO POR INJURIAS AL REY Y ENALTECIMIENTO DEL TERRORISMO

Valtonyc se enfrenta a una pena de tres años y seis meses de prisión por distintas canciones de sus discos Residus de un poeta y Mallorca es Ca Nostra.

Por: @acarriog

España suma un capítulo más en cuanto a la fina línea entre la libertad de expresión y el rap. Tras las condenas a Pablo Hasel y al grupo La Insurgencia, ahora es el turno del cantante mallorquín. El Tribunal Supremo ha confirmado la pena impuesta por la Audiencia Nacional. La sentencia afirma que Valtonyc ha cometido los delitos de injurias graves a la corona, enaltecimiento del terrorismo y calumnias.

El rapero hacia referencias en algunas de sus canciones a grupos terroristas armados españoles, así como exponía de forma muy clara, su disconformidad con el sistema. Las frases por las que ha sido condenado pueden abrir un debate en cuanto a qué se puede decir encima de una base, pero el Tribunal Supremo ha considerado que “los referidos contenidos no quedan amparados por la libertad de expresión o difusión de opiniones”.

Valtonyc ha intentado defender su posición amparándose en esa libertad de expresión y en la propia esencia del hip hop. Según Europa Press, el rapero ha declarado que el rap tiene un lenguaje extremo, provocador, alegórico y simbólico. Frank T, conocido rapero español y comentarista en Red Bull, ha declarado que si el mallorquín acaba en prisión por las letras que ha escuchado, “deberían arrestar al 80% del rap español, porqué todos tenemos rimas así en alguna canción”.

O en una batalla. O en un freestyle. Las amenazas, las provocaciones, las injurias y hasta prácticamente el enaltecimiento son parte de la rutina de las batallas y del rap. Porqué es un espacio donde expresarse libremente, donde plasmar ideas que no deben porqué tener una repercusión directa en la realidad. Por eso nadie ha encontrado pruebas de que Valtonyc planeara hacer nada de lo que dice en sus letras. Porqué es una expresión artística, no un programa político.

El canal de Youtube de Podemos encargó esta canción sobre la monarquía a Valtonyc, por la que ahora está acusado de injurias graves a la corona.

Kase O, Capaz, Piezas, Arkano o Walls son algunos de los raperos y freestylers que se han mostrado en contra de la sentencia. El miembro de Violadores del Verso dejaba claro en su Twitter que para él “condenar la vida de un joven que no hizo más que plasmar sus sentimientos […] es, en definitiva, condenar los sentimientos de una persona”. Nadie debería poner límites en lo que alguien expresa en una pieza artística.

Pero eso no quita lo que ha dicho en sus canciones. “El rey tiene una cita en la plaza del pueblo, una soga al cuello y que le caiga el peso de la ley”. Una frase que queda fuera de lo aceptado políticamente, pero que no supone ninguna amenaza para el rey. Sí, Valtonyc ha propasado límites, pero es que de forma alegórica y simbólica muestra su rechazo absoluto a la monarquía. Y así con cada una de las instituciones del estado. Y nadie, como el mismo afirma, le va a hacer callar. Y todavía menos le van a hacer cambiar de opinión.

Dolores de Amonal es uno de los temas más agresivos de Valtonyc, hasta 10 de sus frases han sido señaladas por la justicia.

Decía Nega, antiguo miembro de los Chikos del Maíz, ahora en Riot Propaganda, que hay una diferencia entre lo que se expresa de forma literal en una canción y lo que significa. La interpretación de las letras del artista por parte del público es parte del proceso, no parte del problema. El Tribunal Supremo ha condenado y sigue condenando la posibilidad de entender, de ir más allá de una simple expresión de rabia.

Nadie recuerda a Kase O mandando a Metro a hacer gárgaras al Niágara, pero todos saben como va esa frase. El público ha sabido distinguir entre lo que sentía Kase, lo que quería decir y lo que decía. Bien, el Tribunal Supremo y la Audiencia Nacional no saben hacerlo. Mientras tanto, jóvenes bajan cada fin de semana al parque, a ver como unos raperos se humillan unos a otros con rimas, descargando rabia. Al acabar se abrazan y siguen con la tarde. El rap y el freestyle tienen algo que enseñarle a la sociedad. O al menos a la justicia.