AUTOPSIA AL FREE #5, CON JUAN ORTELLI

Esta vez, el foco de Autopsia al Free no apunta a un MC. Durante los primeros meses de la existencia del Estilo Libre, nos sentamos junto a una de las imprescindibles voces del panorama internacional. Director de Rolling Stone Argentina, referente periodístico y analítico, experimentado juez nacional e internacional, pionero en cuánto llevar al freestyle a la profesionalidad. El mendocino no deja ningún cabo suelto. Así es y así piensa Juan Ortelli.

Por: Ludmila Cumo

JUANSE: El freestyle va en camino a profesionalizarse, esto quiere decir que los freestylers van a poder vivir de esto. ¿Crees que el freestyle se debería ver más como un hobby o que se puede ver como un trabajo?

JUAN ORTELLI: Hay que pensar dos cosas: por un lado que siempre fue profesional en términos de alcance, ¿no?, porqué si pensamos en esto, Red Bull estuvo desde el día uno, o sea, hubo desde el día uno una marca que fue la que empujó a que se creara un circuito de batallas internacional. Por otro lado, me parece que obviamente tienen que cobrar por lo que hacen porque dan muchos shows. Algunos de los freestylers que vemos hoy como referentes de la escena son artistas increíbles en lo que hacen. Muchos son dignos de ser casos de estudio. Merecen cobrar por lo que hacen, porqué además dan más show que muchas de las bandas del circuito. Son artistas que merecen cobrar, desde luego.

JUANSE: Con esto de la Liga Profesional de freestyle que está impulsando Urban Roosters parece que España va en camino a eso, ¿crees que en Argentina se pueda hacer algo por el estilo?

 

JUAN ORTELLI: Sí, me parece que no sería difícil que eso ocurra en Argentina, o en toda Latinoamérica o en un Mercosur.

JUANSE: ¿Y qué crees que pasaría con la esencia amateur?

JUAN ORTELLI: Me parece que eso continúa. Los que por ahí trabajamos en medios hace muchísimos años lo vemos en todos los géneros. Si estudias la historia de la música, sabés que lo que le pasa hoy al freestyle es lo que le ha pasado a la mayoría de los movimientos musicales. Me parece que es hacia lo que va la cuestión. Todo se ha embarcado hacia la profesionalización por suerte, porqué es algo que muchos de los que estábamos en esto hace años esperábamos con mucha fe.

Se trata del actual emblema de la profesionalización. Ortelli ve plenamente posible la existencia de una FMS en Argentina

JUANSE: Sí, sin embargo había mucha gente que creía que el freestyle debía hacerse por “amor”, como si por cobrar plata por hacerlo deje a un lado el sentimiento. Como ejemplo, Sweet Pain dijo que él no iba a ir a eventos que no le paguen por participar, no por ganar si no por participar, y muchos lo criticaron. ¿Cómo funciona esta relación entre el caché y el premio? ¿Cómo crees que se da eso?

 

JUAN ORTELLI: Lo que pasa es que hay una explosión tan grande de cantidad de eventos que hace que si a una persona la están invitando de todas partes, naturalmente va a tener que, digamos, priorizar. Y uno prioriza su tiempo poniéndole un precio. En particular me parece como ridículo querer plantearle a una persona que tiene un determinado talento “no, vos tenés que hacerlo en tal o cual lado” y querer ponerle un coto a lo que un artista hace. La naturaleza del arte es otra, es esa cosa así, salvaje.

Juan Ortelli y su palabra desde la experiencia de trabajar en los medios nos enriquece con su propia mirada de la profesionalización del freestyle, desde una perspectiva que se aprecia debajo del escenario, con su esencia analítica, observadora y crítica que caracteriza la profesión del periodista. Su opinión se asemeja a la de los raperos ya entrevistados, los shows y eventos requieren tiempo, movilidad, y la seriedad necesaria para tomarse el momento de subir al escenario en serio. Es un arte, es digno de ser observado, analizado, un talento que pocos poseen y que no tiene nada de malo que quieran vivir de ello. El amor no denota gratuidad en el trabajo, muchas personas se dedican a lo que aman en la vida y no por ello el tiempo que inviertan tiene que ser un regalo hacia los demás.

 

JUANSE: ¿Y sobre el cambio de la plaza al escenario qué opinas?

JUAN ORTELLI: Me parece que todo artista merece que lo que hace se conozca en más lugares, y eso implica que tenga que haber una estructura mayor, así sea una competencia de plaza, ¿no?. De hecho, hay un circuito de competencias de plaza tanto en varios países.  Algo que antes hacían sólo las batallas de tarimas: hoy hay batallas de plaza en distintas zonas de la Argentina o de España que te pagan un pasaje para que viajes a otra ciudad, como una estrella de rock.

JUANSE: Hay una cuestión narrativa de lo que es el mundo del freestyle de todo esto de “bueno, nosotros salimos de la plaza y tenemos un estilo de plaza, y después vamos al escenario”. Todo tiene una cuestión quizá narrativa para los mismos freestylers y la misma cultura, tanto como para la gente que lo ve desde afuera como la gente que lo ve desde dentro.

 

JUAN ORTELLI: Sí. Lo que pasa es que no se tienen que olvidar los que empezaron escuchando batallas por ahí con esta explosión con, no sé, por ponerte dos referentes: Cocinando Skills y el Auge Team. Todos salieron de una plaza, de un parque o de un estacionamiento, pero todos salieron de alguna parte. No le doy tanta importancia o tanta relevancia a de donde vinieron,  sino a lo que pueden hacer. Eso es lo más importante.

Se volvió común escuchar en estos días que la “humildad de la plaza” ha quedado atrás. Y, en realidad, esta coyuntura se relaciona con lo que Juan plantea, no importa de donde vengan, si sea de una plaza o un estacionamiento, lo que realmente importa es lo que sepan hacer y que su esencia se mantenga en cada lugar en el que los escuchamos. Más allá de la diferencia física que podemos puntualizar entre el escenario y la plaza, lo que interesa es lo que el artista tenga para darnos, porque a pesar de que algunas competencias se sigan haciendo en plazas, cierta publicidad de las mismas, es que justamente, el evento se haga en dicho lugar.

“De la plaza al escenario”, concepto plenamente ejemplificado a través del elevado porcentaje de competidores del Quinto Escalón en la Final Nacional de Red Bull Argentina

JUANSE: Estamos de acuerdo en que el freestyle se profesionalice, pero todavía hay una cuestión amateur en la organización de los eventos. Muchas competiciones te ofrecen ir a cambio de un pasaje, por ejemplo. ¿Vos opinas que ahora que el freestyle está creciendo esto va a empezar a cambiar?

 

JUAN ORTELLI: Me parece que también tiene que salir del propio artista. Calculo que si a uno le interesa ganar determinado torneo va a ir, aunque no le paguen tan bien. El caché lo determina el artista también, es un acuerdo común, y me parece que debería haber como un estándar, que creo que se está fijando. Es un camino y se da de a poco. Es un proceso que en el último tiempo se ha acelerado, pero que durante una década ha sido muy lento. Creo que rapear por “el pancho y la coca” no va a durar demasiado. Ya no sé si existe. También me parece que está bueno que, si de pronto un torneo se pone de moda y todos lo quieren ganar, algunos vayan porque sí, porqué se pagaron el pasaje, porqué me parece que de eso se trata. O sea, a mí lo que más me gusta de esto es que es un poco como el UFC, o las artes marciales mixtas. Es poder ver a gente de distintos lugares y con habilidades diferentes batallando por un cinturón, que muchas veces es simbólico.

JUANSE: Totalmente. También existe un tema que es que todo el freestyle está desregularizado. Es decir, no hay una federación, no hay un consenso común entre los freestylers: no hay nada. ¿Vos creés que es posible que haya una federación? ¿Vos creés necesario que haya una federación? Que sea, por ejemplo, un nexo entre los artistas y las organizaciones.

 

JUAN ORTELLI: La verdad es por lo menos polémico lo que planteas. Por un lado veo las noticias de la FIFA y todo lo que terminó pasando alrededor, y no sé si quiero eso en el freestyle. A la vez me parece que es hacia donde va todo. También creo que debería haber jurados homologados que por lo menos uno por batalla pertenezca a una asociación que esté homologada. Que realmente las cosas se pongan más serias. Bueno, yo he sido jurado internacional de batallas, y a mí lo que me llevo un poco a eso fue ver como se votaban batallas por amiguismo, porqué eran de la misma crew, porqué eran de la misma zona o porqué eran del mismo país. Creo que tiene que ser todo más justo. Todo va hacia ahí, y creo que es natural. Lo que está haciendo Urban Roosters, por ejemplo, tiene un poco de fuerza y puede hoy por hoy generarlo un poco. Me parece que necesariamente va a pasar, y va a pasar más o menos al mismo tiempo en diferentes lugares.

Juan plantea algo parecido a lo que Chuty nos contaba en la segunda edición de Autopsia al Free. Debería existir un consenso para que se establezca una media, una especie de sueldo que los raperos tendrían que cobrar fijamente por cada competencia o cada viaje que hacen para una participación. Más allá de eso, plantea el “folklore” de que aún haya freestylers que decidan pagar sus viajes por su cuenta o que no tengan ninguna paga ante la disposición y el objetivo de ganar ciertas competencias. De todas maneras, se está generando esta fijación de lo que un freestyler debería cobrar para asistir a una competencia o a un evento, de cierta manera, los reclamos de éstos, generó en la industria de la música una especie de seriedad ante las contrataciones y participaciones de grandes nombres. Y sin olvidar, que sin ellos, toda esta revolución del free, no sería posible.

JUANSE: Bueno, el segundo eje que te quería plantear es justamente el crecimiento masivo de esta disciplina, pero pensado desde otra forma, más como el fenómeno cultural que esto significa. ¿Vos cómo ves todo este crecimiento masivo? ¿Qué creés que ha pasado y qué creés que va a pasar con eso?

 

JUAN ORTELLI: Me parece que también se ha dado una cosa muy particular con la explosión del freestyle, que es que creo muchos chicos tienen la posibilidad de ser estrellas a la edad de los 17 o los veintipocos. Estos chicos han tenido la posibilidad de brillar a esa edad, la que tiene que ser. Por otro lado, su público también ha tenido un fenómeno de gente de su misma edad, entonces se ha dado como esa mezcla muy única. Yo lo que creo de esta generación, que es la que empujo la explosión del freestyle, es que ellos lo ven como lo que les paso a ellos. Eso es lo mejor, lo más rico, lo que más me emociona y lo que me parece que le da ese fuego distinto que tienen que tener las explosiones culturales.

 

JUAN ORTELLI: “…ese fuego que tiene una explosión cultural”

JUAN ORTELLI: Al día de hoy hay mucha crítica hacia la gente nueva. ¿Qué piensas de ese odio a la gente que empieza a conocer la cultura?

 

JUAN ORTELLI: Mira, por un lado me parece como que ya es medio un lugar común, pero hacerle un hating a alguien que recién empieza o entra a una cultura no va. Yo nací en el 82, tengo 34 años, lo vi en un montón de géneros y siempre me ha parecido un desastre.  Sobre todo en los noventa, para los que por ahí no lo vivieron, se usaba mucho la de tener un poco de información y guardártela, ¿entendés? Cero de compartir, que es lo que hace que crezcan las cosas. Por un lado me parece que hay que tratar de no hacerlo, de ser referentes en ese sentido, de ser más abiertos, de que todos podamos tener más o menos la misma información, para que haya menos errores o para que la cosa esté más sana.

 

Un fenómeno inevitable que viene junto con el crecimiento del free joven es la crítica a lo nuevo. Algo que Juan plantea que sucedió siempre. Y esto no solo sucede y ha sucedido en la música, sino que en todos los ámbitos donde se desarrolle alguna disciplina artística va a existir el favoritismo, la competencia y el odio. Hay que tener en cuenta que todo esto ha explotado junto con el fenómeno de las redes sociales y los millennials. Tomando esto, entendemos que los mismos artistas han obtenido su fama y popularidad gracias a las plataformas y redes digitales, donde es inevitable tener comentarios negativos más allá de todos los positivos que puedan recibir.

 

JUANSE; Lo que pasa con todo esto es que también puede haber una inserción de lo que son las lógicas comerciales. Es decir, que venga un día una empresa y diga, por ejemplo, “bueno, venid Blon, Chuty y Hander. Nosotros hacemos una liga aparte con ustedes, contratamos su exclusividad de imagen y ustedes no pueden participar en otro lado”. Obviamente esto causaría un rédito económico mucho más grande para los freestylers, pero también una cuestión de que los apartaría de otras competiciones. ¿Cómo ves eso? ¿Lo ves posible? ¿Lo ves bueno para la cultura o sería malo?

JUAN ORTELLI: Si lo ponemos así, estaríamos fantaseando demasiado, me parece. Estamos fantaseando que va a venir una empresa, que además le van a pedir exclusividad… no sé, habría que ver. Pero, me parece que algo de eso ya está pasando, ¿no? Digo, hay una marca de alfajores que acaba de hacer un reality show de batallas en Argentina, y nadie se escandalizó por eso.  Es plata para los freestylers, no me parece mal. Hay gente muy respetada haciéndolo. Supongo que el futuro se va a imponer, y si nos llega a pasar eso creo que ni vos ni yo vamos a tener la capacidad de hacer que no suceda. Puede pasar y tranquilamente, es una realidad. 

JUANSE: ¿Por qué crees que fue YouTube donde se dio el fenómeno? ¿Crees que solamente porqué es un fenómeno audiovisual?

 

JUAN ORTELLI: Me parece que que hay un ingrediente audiovisual. Tiene mucha épica ver a dos MC’s partirse la madre en una plaza donde había solo una determinada cantidad de testigos. Es por lo mismo por lo que el magma del bullying es filmar a alguien cuando le está pegando al compañero. Además, YouTube, por un lado, porqué todavía no estaba Spotify y muchos lo usaban para escuchar música, y por otro lado porque MTV y los canales de vídeo estaban en  decadencia, logró formar un vínculo. Empezó a haber muchos más videoclips del palo rapero, producidos por raperos y a un estándar muy bueno, incluso en Latinoamérica. Creo que sí, Youtube fue parte del fenómeno y sin dudas fue clave.

JUAN ORTELLI: “Que una marca pague la exclusividad de un freestyler no me parece mal. Es plata para los freestylers y hay gente respetada haciéndolo”.

Como planteábamos antes, el boom se dio en un entorno digital y de redes que era inevitable de la época. Más allá de las habilidades de los freestylers, Juan destaca la parte audiovisual, que tiene su gran importancia en el contenido. Los gestos, las miradas, los movimientos, las ‘’piruetas’’ y todo lo que hay alrededor de una batalla de freestyle es en sí necesario verlo por el morbo que genera ver a dos MC’s rapeando, mirándose con ferocidad y destruyéndose el uno al otro con líricas. En un análisis de como la televisión fue reemplazada por la plataforma de Youtube, nos queda claro que la época ayuda mucho a la explosión del freestyle.

JUANSE: Como periodistas, creo que los dos podemos ver que el tratamiento de la prensa tradicional tiende a estigmatizar, a simplificar e incluso a darle un carácter simple y banal a lo que son las batallas de gallos y el freestyle.  ¿Por qué creés que pasó eso y qué creés que va a pasar en el futuro respecto a eso?

 

JUAN ORTELLI: Me parece que ha habido muy buenas excepciones, como por ejemplo tener a un Pablo Plotkin escribiendo sobre batallas de freestyle, que es una de las mejores firmas de Latinoamérica. Pero sí, la prensa convencional es obvio que no está preparada para hablar de batallas de freestyle. Y creo que el futuro va a tener más que ver con gente que realmente esté enterada de lo que pasa en las batallas como para escribir y hablar sobre eso. En ese sentido, tal vez, todo tienda a ser más parecido al periodismo deportivo. Va a tener más que ver con estadísticas o con técnicas y con cosas que son más fáciles y son más cuantitativas, digamos. Creo que hemos tenido algunas excepciones, pero en general lo que se escribe o lo que se sabe que es bueno está pasando en los canales independientes, de los cuales soy suscriptor de casi todos, y me encantan, y es de lo que más veo. Creo que no estoy descubriendo la pólvora con esto que te digo.

JUANSE: Nosotros, por ejemplo, intentamos llevar adelante el periodismo del freestyle de una manera un poco diferente de lo que venían siendo los canales de Youtube. Quizá estamos más afiliados a lo que es la prensa tradicional. ¿Creés que el futuro del periodismo radica en este tipo de periodismo digital, audiovisual y una cuestión de esta forma? ¿O creés que se tiene que dejar quizás al contenido de lo que hoy son los youtuber, que es más cercano al público?

JUAN ORTELLI: Me parece que, primero, hay que pensar como que lo que haces como periodista, digamos, tiene que trascender el freestyle o lo que sea. Creo que va a convivir un poco lo que se haga desde un punto de vista más tradicional y lo que se haga desde una cosa más subjetiva, al estilo de lo que hacen los youtubers. Lo que va a marcar la diferencia va a seguir siendo lo que la marcó siempre, ¿no? La originalidad, el punto de vista, la forma en la que haces las cosas básicamente. Yo creo en eso, y me parece que el futuro no se diferencia tanto del pasado en ese tipo de cosas.

JUANSE: ¿Qué tan lejos crees que estamos de llevar este fenómeno audiovisual a una plataforma como la de la televisión? Es una plataforma que quizás podría nutrirse mucho de esto, pero que tendría que convivir con palabras mal sonantes, con frases mal sonantes, con cosas políticamente incorrectas. ¿Qué tan posible lo crees y cómo lo ves?

 

JUAN ORTELLI: Mirá, desde ese enfoque más deportivo me parece súper posible. Creo que estamos más cerca que nunca de que se entienda el freestyle como por ahí se lo entiende al skate. El skateboard o el surf, pero más el skateboard, han tenido una parábola de desarrollo muy similar a la del freestyle, y me parece que la gente ya está muy cercana a entenderlo así. Hay abuelos que son skaters, y pronto vamos a conocer a los primeros abuelos raperos. Entonces yo creo que no estamos para nada lejos de eso, creo que pronto vamos a tener cada vez más participación en los canales tradicionales, simplemente porque ellos lo necesitan. Simplemente porqué trackean views y porque es un contenido que rinde. Yo soy un jugador de los medios, dirijo Rolling Stone,  y sé cómo se maneja eso, y sé por qué los medios tradicionales hoy se acercan al freestyle. No me parece mal, o sea, me parece que hay que usarlo en favor de esto. Creo que el periodismo de freestyle, si se quiere, es como una consecuencia natural de esa explosión. La escena terminó autogenerando sus propios medios, porqué los medios tradicionales tardaron muchísimo en mostrarse afines. Pero están tan lejos los medios tradicionales… salvo Rolling Stone, donde le hemos dado un espacio básicamente porqué yo estuve ahí militando durante 15 años, pero los medios tradicionales están demasiado lejos. 

La batalla entre el periodismo tradicional y los nuevos canales de comunicación en su mirada del freestyle. Hay que entender que los medios tradicionales no lo tocan porqué no están acostumbrados a esta disciplina, que a pesar de llevar su tiempo, nunca ha tenido tanta repercusión como la que ha tenido hoy. Como sucede con muchas cosas, las profesiones se van afinando y el día de mañana, aquellos fans del freestyle se podrían convertir en periodistas especializados en la escena con su propia columna en una revista, una radio, o un canal de YouTube informativo. Debido a que los medios tradicionales no se abocan al tratamiento de disciplinas de este tipo, han surgido medios alternativos que buscan el tratamiento del freestyle como una disciplina que debe ser observada, que tiene sus complejidades, que requiere de tiempo y de amor a lo que se hace. Así como plantea Juan, como hoy podemos ver competencias mundiales de skateboard en un canal de televisión, es muy seguro que estemos prontos a que los medios entiendan la grandeza del freestyle y empiecen a replicar esta disciplina como lo que es. Algo que requiere talento, perseverancia, compañerismo, entrenamiento y habilidad.

CATEGORIES
TAGS

COMMENTS

Wordpress (0)
Disqus ( )